Imaginen un pozo de la misma altura de las Torres Gemelas. 435 metros en caída libre.
Se trata del segundo pozo más profundo del mundo y está en Cantabria.
Lo descubrieron hace unos meses un grupo de espeleólogos cántabros que este fin de semana han visitado Madrid para explicar a sus colegas madrileños este hito de la espeleología en España.