Un grupo de investigadores ha desarrollado unas gafas inteligentes capaces de identificar células cancerígenas. En concreto, el dispositivo permite teñir en la pantalla de las gafas de un color azul las células malignas para diferenciarlas de las normales y así después poder extraerlas.
El equipo consiste en un prototipo elaborado por un grupo de científicos de la universidad de Washington liderado por Samuel Achilefu y según Science Daily ya ha sido utilizado en un caso real recientemente. No obstante, los investigadores continúan desarrollando el dispositivo y no descartan incorporar funciones más avanzadas para que se amplíe el abanico de aplicaciones en cirugía.
La principal ventaja de estas gafas radica, por tanto, en que los cirujanos se pueden asegurar de que no quedan células cancerígenas sin eliminar durante la cirugía. Como consecuencia, "esto significaría que las gafas anulasen la necesidad de cirugía posterior y el dolor, molestias y ansiedad asociados", ha explicado la doctora Julie Margenthaler.
Esta aseguró que entre el 20 y 25 por ciento de los pacientes de cáncer de mama a los que se le han retirado los tumores, requieren una segunda cirugía porque la tecnología actual no muestra de forma adecuada las dimensiones en las que se ha extendido la enfermedad durante la primera operación. "Esperamos que con esta nueva tecnología se limite o se elimine la necesidad de una segunda cirugía", ha añadido Margenthaler.