El Grupo Especial de Rescate en Altura (GERA) del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid auxilió en 2014 a un total de 314 personas extraviadas o lesionadas en la sierra madrileña.
Según ha detallado la Comunidad en un comunicado, durante el año pasado se realizaron 197 intervenciones, lo que supone un aumento del 28% con respecto al año anterior.
De ellas, 63 fueron operaciones de búsqueda de personas extraviadas y 134 rescates de personas heridas o lesionadas.
Una de cada cinco personas auxiliadas era menor de edad, de entre 0 y 18 años; y la misma proporción, un 20%, se da ente los socorridos con edad comprendida entre los 18 y 29 años.
Los fines de semana, especialmente los sábados, es cuando más operaciones se requieren, hasta el punto de que la probabilidad de que sea necesaria una intervención de búsqueda o rescate en sábado o domingo es casi cuatro veces superior a cualquier otro día de la semana.
La práctica del senderismo es la que más intervenciones genera, casi un 70% de la totalidad de salidas del GERA; sin embargo, los deportes más tecnificados y que tienen mayor riesgo, como el alpinismo, la escalada y el esquí de travesía, o la práctica del ciclismo, representan el 12% de las activaciones.
Respecto a las zonas, la Pedriza es la que mayor número de intervenciones produce, con un 30% de las activaciones, seguida de la zona que comprende Siete Picos-Navacerrada-Cercedilla con un 20%; Cotos y Peñalara con un 16%; Bola del Mundo, Maliciosa, Cuerda Larga, Morcuera y Canencia (9%); Valle de Lozoya (9%) y Otros (16%).
El helicóptero del GERA fue movilizado en dos de cada tres intervenciones del grupo, y en una de cada cinco operaciones sirvió como apoyo a las unidades terrestres.
Desde que se puso en marcha en 1999, el Grupo Especial de Rescate en Altura del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid ha llevado a cabo 1.943 intervenciones, de las que 753 han sido búsquedas de personas y 1.190, rescates.
En la actualidad, el grupo está formado por un total de 50 bomberos profesionales, todos ellos expertos en trabajos en condiciones hostiles, esquí, alpinismo, pasando por la supervivencia y la orientación, y con un profundo conocimiento de la geografía de la Sierra de Madrid.