España se halla en el puesto 24 de la Unión Europea (UE) en materia de desarrollo global de la juventud, únicamente por delante de Croacia, Italia, Bulgaria y Rumanía, según revelan los datos del Indice de Desarrollo Juvenil Comparado 2016, elaborado por primera vez por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, en el marco del ProyectoScopio, un proyecto global de recopilación, sistematización, obtención de datos para el análisis de la realidad y socialización juvenil.
Así se ha puesto de manifiesto este jueves 6 de octubre, durante la presentación de los primeros resultados del Indice anual, en la que ha participado el director general de la FAD, Ignacio Calderón; el catedrático de Sociología y miembro del comité asesor del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Enrique Gil Calvo; y la coordinadora del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, Anna Sanmartín.
En materia de desarrollo global de la juventud, el estudio pone de manifiesto que los primeros puestos de la tabla los ocupan países del norte de Europa como Dinamarca, primero en el ranking, seguido de Finlandia, Países Bajos y Suecia.
En cuanto a las comunidades autónomas, se aprecian diferencias entre las del norte y las del sur, de forma que los primeros puestos en la tabla de desarrollo de la juventud --a excepción de Madrid-- son para el País Vasco, Navarra o Asturias. Por el contrario, Andalucía, Castilla-La Mancha, Canarias y Baleares son las peor posicionadas en cuanto a nivel de desarrollo juvenil.
Según los autores del estudio, las variables de empleo y emancipación son las que lastran el resultado global del Indice, a pesar de que la posición que ocupa España en las variables de vida y Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) supera el total de la UE, con regiones como La Rioja y Cantabria a la cabeza.
EN EDUCACION, MAS CERCA A LA UE
Respecto a la educación, España (con un valor del 0,51) se sitúa por debajo de la media de la UE (0,57), pero más cercano a ella que en los casos de otras dimensiones como el empleo y la emancipación, y con varias comunidades que la superan como el País Vasco (0,74) a la cabeza (la tercera en el ranking total). Baleares aparece a la cola de todos los territorios de la Unión Europea (0,17).
En este sentido, el índice apunta que España sólo supera el valor de la UE en la tasa de población de 25 a 29 con educación terciaria. En las tasas de participación en educación en distintas edades, sus niveles son muy parecidos a los del conjunto de países europeos, si bien es en el aprendizaje de al menos dos idiomas extranjeros en la enseñanza postobligatoria y el abandono de los estudios tras la ESO donde su posición es notoriamente inferior.
Por otro lado, el Indice destaca que la tasa de desempleo de la población joven en la UE es de 17,6% (en España del 39,6%). Así, a la cabeza se hallan los Países Bajos (0,84) y a la cola Canarias (0,18). Por debajo de la media española hay 7 comunidades autónomas y sólo Grecia en la UE.
Para los autores del estudio, la situación de desventaja relativa se explica por los bajos valores de España en la tasa global de empleo, la tasa de desempleo, la tasa de parcialidad involuntaria y la tasa de temporalidad, ya que la cifra de trabajadores por cuenta propia rebasa la del total de la UE, y la de jóvenes inactivos que no estudian se halla aproximadamente al mismo nivel que para el total de la UE. RETRASO EN LA EMANCIPACION
En cuanto a desarrollo juvenil atendiendo al nivel de emancipación, la investigación muestra como la media de la UE se sitúa en 0,37, mientras que España registra 0,16. Por regiones, la Comunidad Valenciana es la mejor situada (0,23), entre ambos totales, y Canarias la que está más a la cola (0,1). Además, en los extremos se sitúan Dinamarca (con valor máximo de 1) y Croacia (0,02).
Según los autores del estudio, en el caso español la crisis económica ha influido en el retraso de la edad media de emancipación (en torno a los 29 anos), pero también observan como determinantes las características culturales, modelos familiares y políticas públicas que contribuyen a que, junto a italianos y portugueses, los españoles sean de los europeos que más tarde se van de casa.
En la dimensión de Vida --incluyen datos de mortalidad, fecundidad, accidentes o suicidios--, España (0,71) se coloca por encima de la media de la UE (0,67), con 11 comunidades por encima de la media española y muchas de ellas en una posición alta de la tabla. En este caso, destaca La Rioja que se sitúa al nivel de Dinamarca, Países Bajos o Suecia; mientras que Galicia (0,6), Navarra (0,66), Asturias (0,65) y Castilla y León (0,67) están por debajo de la media de la UE.
En concreto, las bajas tasas de fecundidad de las adolescentes en España repercuten positivamente en el índice, pero esas mismas tasas lo hacen negativamente si se atiende a los datos de jóvenes de 22 a 29 años. En los indicadores sobre mortalidad, España aparece más favorablemente posicionada que el conjunto de la UE, siendo Lituania el país de peor comportamiento.
En materia de TICs, España (0,7) no está mal posicionada en comparación con el resto de países de la UE (0,59), entre los que Rumanía se sitúa a la cola (con el mínimo, 0, en ambos indicadores) y Lituania en la primera, sobre todo, por la elevada capacitación de los jóvenes en el uso de ordenadores. Cataluña es la comunidad mejor puntuada (0,88), mientras que La Rioja (0,53) y Castilla León (0,5) están a la cola de España y por debajo de la media UE.
El índice, que se renueva anualmente, está elaborado a partir de datos relativos a educación, empleo, emancipación, vida (mortalidad, fecundidad, accidentes y suicidios) y uso de nuevas tecnologías. En él se ofrece una fotografía fija que permite comparar de manera transversal el estado de la juventud española con la europea y también entre comunidades autónomas.
