Ecologistas en Acción otorga este año 79 banderas negras a los lugares más degradados y 12 puntos negros a los lugares más amenazados de la costa. De estos galardones, 20 corresponden a las obras e infraestructuras, 23 al urbanismo sin control, 33 a los vertidos al mar y 3 corresponden a los "residuos" generados por los grandes eventos.
Ecologistas en Acción ha presentado su informe anual banderas negras, con el título “Poca vergüenza”, que analiza la situación de la costa, mostrando la degradación y amenazas que sufre el litoral español. Así mismo, señala a responsables e implicados en este proceso de destrucción.
La gran proliferación de obras e infraestructuras ha provocado una rápida y descontrolada transformación del suelo. En la actualidad el 75 % del litoral se encuentra urbanizado o declarado urbanizable, el 44 % de la población vive en la costa y la industria del turismo desarrolla el 80 % de su actividad en la estrecha franja de 7 kilómetros, donde se estima pasan sus vacaciones 48 millones de personas.
El informe identifica 12 puntos negros, que señalan lugares que no sufren una transformación del territorio destacada y que se encuentran en estado semivirgen, pero amenazados por proyectos que pueden provocar la desaparición de los mismos. Algunos de estos casos son Valdevaqueros (Cádiz), Marina de Cope (Murcia) o la Playa de Ahuir en Gandía (Valencia).
LA SOMBRA DE LA BURBUJA INMOBILIARIA
El análisis del urbanismo denuncia la actividad de las Administraciones Públicas por seguir favoreciendo a los responsables del legado de la industria del ladrillo y la especulación, que con los usos del suelo han plagado la costa de activos tóxicos, es decir, procesos especulativos de antaño han pasado a ser a día de hoy viviendas y suelos sobrevalorados, claro ejemplo de ello son la zona de la Mangueta en Vejer (Cádiz) o Marina de Cope, entre otros. Nos encontramos ante más de 730.000 viviendas disponibles o en venta (entre 2004-2010), nada menos que el 65 % del total.
El informe detalla las obras costeras que, aunque en 2011 el presupuesto de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y Mar se recortara a 100 millones de euros, la inversión para artificialización de la costa se mantuvo: Construcción o culminación de obras de creación de paseos marítimos como los de Bolnuevo (Murcia), el Delta del Río Andarax (Almería), Gandía (Valencia), Badalona (Barcelona) o Cunit (Tarragona). El mantenimiento y consolidación de nuevos núcleos urbanísticos como Benicassim (Castellón), la Costa Occidental de Málaga o La Mamola (Granada). Y el aporte artificial de arena de yacimientos marinos o de cantera se reparte por toda la costa.
Otra obra costera con enorme impacto sobre el perfil costero es la elevada construcción de puertos deportivos, que provocan altos impactos sobre gran número de playas, como por ejemplo en: Barcelona, Tarragona, Valencia o Castellón. En términos globales las inversiones en infraestructuras portuarias, contenidas en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes 2005-2020, son de 22.489 millones de euros destinados a aumentar un 75 % la capacidad de los puertos.
Por último, el estado de las costas es cada vez más preocupante, en términos de calidad de aguas y situación de los ecosistemas. En este aspecto el déficit de infraestructuras y mala depuración de aguas residuales representa un grave problema que se suma al causado por los vertidos procedentes del sector industrial. En el informe banderas negras se considera necesario una adaptación de las depuradoras a la capacidad del territorio evitando así los continuos vertidos de aguas residuales mal depuradas, modificando la Ley de Responsabilidad Ambiental en materia de vertidos.