La Duquesa de Alba, Cayetana Fitz-James Stuart, procedió el pasado 4 de julio al reparto anticipado de su herencia entre sus seis hijos, Carlos, Jacobo, Alfonso, Fernando, Cayetano y Eugenia, informaron a Europa Press en fuentes solventes. El reparto se ha llevado a cabo por medio de una donación escriturada ante un notario de Madrid, donación a través de la cual los hijos pasan a ser titulares registrales de sus bienes. No obstante, la Duquesa seguirá gerenciando y administrando todos sus bienes.
La donación, tal como se requiere jurídicamente para que produzca efectos, ha sido aceptada por todos los hijos de la Duquesa, los cuales están plenamente conformes con la decisión tomada por su madre y agradecidos de ésta.
Según las fuentes consultadas por Europa Press, con esta decisión Doña Cayetana da un paso adelante y demuestra una vez más, y con este acto, la buena relación que mantiene con todos sus hijos y la generosidad que siempre le ha caracterizado.
La Duquesa de Alba nació el 28 de marzo de 1926 en el Palacio de Liria, en Madrid. Tras la muerte de su padre Jacobo Fitz-James, en 1953, heredó el Ducado. De su matrimonio con su primer marido, Luis Martínez de Irujo y Artacoz, en octubre de 1947, nacieron seis hijos: Carlos, duque de Huéscar; Alfonso, duque de Aliaga, Jacobo, conde de Siruela; Fernando, marqués de San Vicente del Barco; Cayetano, conde de Salvatierra y Eugenia, duquesa de Montoro.
Tras la muerte de su primer marido en 1972, la Duquesa de Alba volvió a contraer matrimonio seis años después con el ex-sacerdote Jesús Aguirre, quien se convirtió en decimoctavo Duque de Alba. Aguirre falleció en Madrid el 12 de febrero de 2001.