Desarticulan una red que llevaba hachís a Francia en coches a 200 km/h

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La Guardia Civil y la Gendarmería han detenido a 20 personas (13 en Francia y 7 en España) que integraban una red de narcotráfico que trasladaba hachís desde el sur de España al país galo por el método "go fast routier", es decir, llevar la mercancía en coches de alta gama a más de 200 kilómetros por hora.

En esta operación conjunta, bautizada Go Fast-Gascón, los agentes han practicado 32 registros en España y Francia en los que se han intervenido 1.550 kilos de hachís, 240 gramos de cocaína, 67.500 euros y 9 vehículos de alta gama, y el valor de todo lo incautado se calcula que asciende a 4 millones de euros.

La cooperación entre ambos países se inició al detectarse una conexión entre una investigación que llevaba a cabo la Guardia Civil y otra de la Gendarmería nacional francesa, lo que motivó la creación de un equipo conjunto de trabajo entre ambos Cuerpos de Seguridad, con el fin de desarticular la organización criminal.

Durante la investigación, los agentes comprobaron que la organización era liderada por una persona de origen marroquí asentada en Francia.

Este jefe se encargaba de organizar toda la infraestructura necesaria y de elegir a los integrantes de la red que debían acompañarle en sus viajes a España para coordinar la compra y traslado del estupefaciente.

ALMERÇÍA, CENTRO DE OPERACIONES

En España, la base de operaciones del grupo delictivo se ubicaba en la provincia de Almería, desde donde uno de sus miembros mantenía los contactos con los proveedores del hachís afincados en Marruecos.

La droga era introducida en nuestro país a través de alijos en la playa, desde donde un tractor sacaba del agua la embarcación con la droga y la trasladaba en un remolque hasta un almacén, donde se depositaba el estupefaciente hasta su envío a Francia.

En el método del "Go Fast Routier", el vehículo que porta la droga va acompañado en todo momento por otros coches que realizan labores de contravigilancia para alertar sobre una posible presencia policial en la carretera.

Esta modalidad de traslado es altamente peligrosa, tanto para los agentes investigadores como para el resto de usuarios de las carreteras, dado que los detenidos conducen de forma temeraria con desprecio hacia la vida de los demás.

Una vez que el estupefaciente llegaba a Francia, era colocado en el mercado por una red de distribución a pequeña escala, dependiente de la misma organización, lo que les permitía obtener unos beneficios superiores al 250 % con respecto a la venta del hachís en España.

La operación se ha saldado con el desmantelamiento al completo la organización criminal: proveedores, custodia, traslado y distribución en España y Francia.

Las investigaciones, dirigidas por el Juzgado de Instrucción número 2 de El Ejido (Almería), han sido llevadas a cabo por Unidades Centrales de Investigación Contra el Crimen Organizado de la Guardia Civil, Comandancia del mismo Cuerpo de Almería y grupos de investigación de Landas, Pau y Poitiers de la Gendarmería Nacional Francesa.