El Juzgado de Instrucción número 9 de Bilbao ha concedido la orden de alejamiento de la secuestradora respecto a la familia del recién nacido raptado el pasado miércoles, 19 de octubre, en el Hospital de Basurto (Bilbao), han informado fuentes jurídicas.
La orden incluye que la secuestradora no puede acercarse a menos de 500 metros de los padres y del bebé, y prohíbe que se comunique con ellos. Su abogado ha estado conforme con esta resolución.
El padre del bebé registró el pasado lunes la solicitud de esa medida de protección, que se ha resuelto favorablemente este miércoles.
La raptora confesa, de 24 años, permanece desde ayer ingresada en la unidad de Psiquiatría del Hospital de Basurto. Tras su detención, el jueves 20, la joven pasó a disposición judicial el sábado, y la jueza de guardia la dejó en libertad provisional sin medidas cautelares.
Durante su comparecencia judicial, tanto ella como su abogado y sus familiares pidieron a la jueza su ingreso en un hospital psiquiátrico, pero los forenses consideraron que no era necesario.
Tras este rechazo, ya advirtieron que solicitarían el ingreso voluntario.
La sustracción del bebé se produjo sobre las nueve de la noche cuando la joven se hizo pasar por sanitaria y se llevó al recién nacido con la excusa de practicarle unas pruebas.
En la mañana siguiente dejó al pequeño sobre el felpudo de un piso del barrio de Santutxu de la capital vizcaína, donde fue hallado en buen estado.
Unas dos horas después, la secuestradora, que había comentado a vecinos y conocidos que estaba embarazada y que ya había comprado ropa y una silla de bebé, fue detenida en el barrio bilbaíno de Zorroza.