Canarias ha sido el único punto de Europa desde el que se ha podido contemplar esta madrugada la primera fase del eclipse total de la Luna, que duró 40 minutos, y fue seguido por numerosos aficionados a la astronomía.
Desde el parque nacional del Teide, en Tenerife, el colaborador externo del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), David Hernández, ha fotografiado cada segundo del eclipse lunar, que comenzó a las 07.00 de la mañana (hora local) cuando la Luna estaba ya rozando el horizonte oeste y cerca del amanecer.
Hernández enviará las fotos de los cielos canarios a Perú, donde se encuentra una expedición coordinada por el investigador del IAC, Miquel Serra-Ricart para que se pueda publicar por internet el fenómeno del eclipse al completo.
Estas imágenes servirán, asimismo, para desarrollar varias actividades educativas dirigidas a estudiantes de secundaria.
Los eclipses de Luna se producen cuando hay un alineamiento perfecto entre el Sol, la Tierra y la Luna, ha explicado a Efe Hernández, que pertenece a la Sociedad Astronómica de Tenerife.
El Sol pasa por detrás de la Tierra y la sombra de este planeta se proyecta sobre la Luna, primero de forma parcial y finalmente eclipsándola por completo, ha añadido.
Según ha comentado, este inusual fenómeno que se produce cada diez años aproximadamente sólo se ha podido ver desde Canarias, región geográficamente africana, ya que en el momento de iniciarse el eclipse el resto de Europa ya estaba mirando al sol.
No obstante, sólo se ha podido observar la primera fase del eclipse, pues la sombra de la Tierra solo ha eclipsado a la mitad de la luna, que ha lucido espectacular en un cielo que se pudo contemplar despejado a 1.980 metros de altitud, en el mirador de Samara, desde donde se podía ver la silueta de la isla de La Gomera.
También se pudo distinguir a la perfección el conocido como cinturón de Venus, una franja de tonos violáceos en los que se enmarcaba el eclipse de luna.
Rafael Cedrés, miembro de la Sociedad Astronómica de Tenerife, ha destacado el buen tiempo que ha hecho en el parque nacional del Teide, donde a primera hora de la mañana había dos grados y soplaba una suave brisa que no dificultó en ningún momento la labor de los numerosos cámaras y fotógrafos aficionados a la astronomía que subieron a Las Cañadas.
Los apeaderos que hay en la carretera que bordea al Teide se convirtieron esta madrugada en observatorios del cielo, que en contra de todo pronóstico permitió a los aficionados contemplar el eclipse hasta las 07.40 horas de la mañana.
Este eclipse lunar es el primero de cuatro eclipses totales, lo que se conoce como tétrada de eclipses, que se sucederán en un intervalo de unos seis meses entre ellos.
Los tres primeros se verán desde América y Oceanía pero el último de ellos, que tendrá lugar el 28 de septiembre de 2015, será perfectamente visible desde Europa.