El ministro en funciones de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, afirmó que en la próxima legislatura "tendría que haber una ley de alcohol" orientada a disminuir su consumo entre los menores, que aunque mantiene un "descenso constante en los últimos años", sigue afectando a un 78,9% de quienes tienen entre 14 y 18 años.
Alonso hizo esta afirmación en la presentación de los resultados de la Encuesta Estatal sobre Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanza Secundaria (Estudes 2014-2015), que evidencia una disminución en el consumo de todas las sustancias analizadas y que señala que los encuestados perciben el alcohol como la droga menos nociva.
El trabajo, cuyos resultados desgranó el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Francisco Babín, pone también de manifiesto que las mujeres consumen tabaco, alcohol e hipnosedantes en mayor proporción que los hombres, quienes están por delante en el uso de drogas ilegales.
La encuesta analiza un total de 18 sustancias y se ha hecho con una muestra de 38.486 estudiantes de entre 14 y 18 años de 941 centros educativos públicos y privados y 1.858 aulas. Tal y como indicó Babín, los datos señalan que desciende el consumo de todas las drogas y que el alcohol y el tabaco, seguidos del cannabis, siguen siendo las drogas más consumidas por los estudiantes españoles.
Le siguen, por este orden, hipnosedantes (con y sin receta), cocaína, éxtasis, alucinógenos, anfetaminas, inhalables volátiles y heroína, que se sitúa en último lugar.
Del mismo modo, apuntan a que se rompe la tendencia creciente en el consumo de hipnosedantes por parte de las mujeres, por lo que sigue siendo un consumo "fundamentalmente femenino", y que los estudiantes de entre 14 y 18 años perciben el alcohol como la sustancia menos peligrosa y consideran que el tabaco lo es más que el cannabis.
ALCOHOL
En cuanto al consumo de alcohol, el delegado del Plan Nacional sobre Drogas dijo que aunque la prevalencia continúa siendo muy elevada, los datos de esta encuesta revelan un considerable descenso de la ingesta entre la población entrevistada, más acusado en el caso de los consumos intensivos (frecuencia de borracheras en los últimos 30 días y consumo en forma de atracón).
Aun así, un total de 285.700 estudiantes de entre 14 y 18 años empezaron a consumir alcohol un año antes de realizarse el estudio, que revela que el 78,9% de los estudiantes de entre 14 y 18 años ha probado alguna vez en la vida el alcohol. En la misma línea, el 76,8% consumió en el último año y el 68,2% lo hizo en el último mes.
El porcentaje de menores que bebe aumenta los fines de semana, cuando las bebidas preferida son los combinados, sseguidos de la cerveza y del vino, en contraposición a lo consumido de lunes a viernes, cuando lo más demandado es la cerveza.
La encuesta indica igualmente que uno de cada tres escolares consumió alcohol en forma de atracón (binge drinking) en los 30 días anteriores a su realización y que este patrón de consumo aumenta con la edad: a los 18 años este porcentaje se eleva al 50%.
El estudio pregunta también por el botellón, cuya prevalencia desciende ligeramente. Seis de cada 10 (57,6%) participaron en un botellón alguna vez en los últimos 12 meses (frente al 62% de la encuesta anterior). También descienden las borracheras: dos de cada 10 estudiantes se emborracharon alguna vez en el último mes y tres de cada 10 escolares (31,9%) tienen un consumo de riesgo durante los fines de semana
TABACO
En cuanto al tabaco, el estudio pone de manifiesto que continúa el descenso en el consumo iniciado en 2004, que se sitúa en mínimos históricos. Aun así, en el último año analizado, un total de 137.000 escolares de entre 14 y 18 años empezaron a fumar.
En 2014, el 38,4% de los escolares decía haber consumido tabaco alguna vez en la vida, el 31,4%, en el último año y el 8,9%, a diario, lo que supone un descenso de 4 puntos respecto a la encuesta anterior.
En los últimos diez años el consumo de tabaco por parte de los estudiantes de entre 14 y 18 años se ha reducido en cerca de un 60%, aunque el 49,7% de los escolares vive en hogares donde se fuma diariamente.
En cuanto al cannabis, es la droga ilegal consumida por un mayor porcentaje de jóvenes, aunque desciende ligeramente su uso entre esta población: tres de cada 10 estudiantes dicen haberla probado alguna vez en su vida y uno de cada cuatro, en el último año analizado, cuando se iniciaron en este consumo un total de 146.200 estudiantes de 14-18 años.
Con respecto a la cocaína, las prevalencias de consumo muestran una tendencia estable, con "muy ligeras variaciones respecto a los consumos registrados en la encuesta anterior". Así, el 3,5% de los entrevistados reconocen haber consumido cocaína alguna vez en la vida; el 2,8%, en los últimos 12 meses y el 1,8%, en los últimos 30 días.
Estudes recoge también información sobre el consumo de anfetaminas, alucinógenos, éxtasis y heroína, que continúan su tendencia descendente y se sitúan en los niveles más bajos de toda la serie histórica para alucinógenos, éxtasis, anfetaminas e inhalables volátiles (con prevalencias entre el 1,2% y el 0,6% para el consumo en los últimos 12 meses. El consumo de heroína para esta misma frecuencia apenas se da en el 0,5% de los encuestados.
Finalmente, Babín señaló que en esta encuesta se ha introducido por tercera vez un módulo específico sobre el consumo de las llamadas sustancias emergentes o nuevas sustancias psicoactivas, que son drogas que se venden por internet y por tanto de gran accesibilidad. Los resultados afirman que el cuatro por ciento de los escolares ha probado este tipo de sustancias alguna vez en la vida, aunque el 53,7% nunca ha oído hablar de ellas.
