Cinco presos históricos de ETA saldrán de la cárcel entre abril y mayo después de haber cumplido sus condenas, según informaron a Europa Press fuentes penitenciarias. El más representativo de este grupo es José Maria Sagarduy, alias 'Gatza', el interno más antiguo de la banda, que recobrará la libertad junto a José María Múgica Pikabea, Jon Aguirre Aguiriano, Estanislao López Agiriano y Andrés Errandonea Arruti. Todos ellos recobrarán la libertad entre el próximo 13 de abril y el 10 de mayo.
El primero salir será Sagarduy, que terminará de cumplir su condena el próximo 13 de abril después de 30 años y nueve meses en prisión. Entró en la cárcel con 21 años y la abandona con 52. Fue detenido el 10 de julio de 1980 y a lo largo de todos estos años se ha convertido en un símbolo en el mundo proetarra.
Al ser juzgado por el Código Penal de 1973 pudo acogerse a las medidas de redención de penas hasta que trató de fugarse de la prisión provincial de Granada abriendo un agujero en el techo de su celda por donde accedió al tejado. Posteriormente saltó a la malla metálica que cubre los patios valiéndose de un cable en cuyo extremo llevaba un garfio. No obstante, no tuvo éxito en su plan y resbaló ruidosamente, lo que alertó al servicio de guardia de la prisión, que le detuvo con una pierna y un brazo fracturado.
La respuesta a su intento de fuga fue su baja inmediata en el plan de redención de penas, lo que le llevó a cumplir 29 años. El año y nueve meses restante que ha permanecido en la cárcel se debe a la aplicación de la 'Doctrina Parot' --que establece que las redenciones se calculan teniendo en cuenta la condena completa y no el máximo de cumplimiento-- y a su condena por el intento de fuga y la agresión a un funcionario de prisión.
El siguiente en salir será José María Múgica Pikabea, de 42 años de edad, quien termina de cumplir condena el 1 de mayo tras 18 años en la cárcel. Fue detenido el 17 de julio de 1991 y en 1995 la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le condenó a 18 años de cárcel por haber facilitado información al 'comando Ipar Haizea' (viento del norte) de ETA para matar a Raúl Suárez Fernández, quien fue asesinado el 8 de junio de 1991 en Rentería (Guipúzcoa). Fue tiroteado por la espalda cuando paseaba a su perro. El animal también fue abatido a balazos.
Las fuentes consultadas han advertido de la dificultad de adaptación en casos como estos en los que los presos casi han permanecido más de la mitad de su vida en prisión. Estas dificultades se demuestran en hábitos como la hora de la comida o el trato con familiares a los que apenas conoce de sus visitas a la cárcel o en el reencuentro con sus localidades a las que tampoco reconocen.
ASESINÓ A UN NIÑO DE 13 AÑOS
El 3 de mayo también termina de cumplir su condena de 30 años Jon Aguirre Aguirriano, quien al igual que Sagarduy nunca se ha arrepentido de sus crímenes y está considerado como uno de los duros del frente de presos de la banda. Fue condenado por tres asesinatos uno de ellos un niño de 13 años, José María Piris, quien murió al darle una patada a un artefacto explosivo que este terrorista había colocado en Azpeitia. Detenido en mayo de 1981 recupera la libertad con 69 años. Actualmente se encuentra en la cárcel de Basauri (Vizcaya) por motivos de salud.
El 10 de mayo sale Estanislao López Aguiriano después de casi 25 años entre rejas. Natural de Oyartzun (Guipúzcoa) fue detenido el 17 de mayo de 1986. Ingresó en prisión con 19 años y la abandonará el centro penitenciario de Castellón con 44.
Ese mismo día también termina de cumplir casi 25 años de cárcel Andrés Errandonea Arruti. Fue detenido también el 17 de mayo de 1986 por la Guardia Civil en Oyarzun, acusado de pertenecer al 'comando Irrintzi'.
Este grupo fue desarticulado pocas horas después de que ametrallara un camión francés en la autopista Bilbao-Behovia. La Guardia Civil les atribuyó varios ametrallamientos de otros tantos camiones franceses, y un intento de atentado contra agentes de la Guardia Civil que vigilaban un colegio electoral en el referéndum de la OTAN. Al comando le fue incautado diverso armamento. Errandonea Arruti ingresó en prisión con 23 años y la abandona con 47.
