Arkaitz Rodríguez Torres, destacado dirigente de Batasuna y preso en la cárcel de Logroño por pertenencia a banda armada, ha conseguido que el juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, José Luis Castro, acceda a su traslado al Hospital Donosti. Hasta aquí, todo normal, pues es lógico que cuando un recluso sufre una patología que no puede ser tratada en el centro penitenciario en el que cumple condena, sea examinado en un hospital. Lo insólito de este caso es que la enfermedad del implicado —una simple tendinitis, según las fuentes consultadas—, no es grave y por tanto es dudoso que para su curación sea necesario llevar al interno hasta el citado centro sanitario.
El juez Castro toma la decisión atendiendo al criterio de los servicios médicos de la cárcel de Logroño, pero en contra del de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, que se opone a esta salida.
Arkaitz Rodríguez Torres, que fue juzgado junto a Arnaldo Otegi y otra serie de individuos por el caso Bateragune, fue condenado por el Tribunal Supremo en mayo del año pasado a una pena de seis años de prisión por pertenencia a ETA. Comparte módulo en la cárcel riojana con el líder batasuno por una decisión del Ministerio del Interior en la etapa en que al frente del mismo estaba Alfredo Pérez Rubalcaba, hoy secretario general del PSOE. Su abogado es senador autonómico desde el pasado mes de febrero.
