El Congreso ha acordado hoy por unanimidad instar al Gobierno a que lleve cuanto antes a la Cámara el prometido proyecto de ley de información pública y los partidos se han comprometido también a impulsar medidas la transparencia y el control de las instituciones, reclamadas por el movimiento del 15-M.
La Cámara Baja también promete tramitar con la máxima celeridad la reforma de legislación sobre financiación de partidos que se tomó en consideración en abril y que reclamaba, entre otras cosas, la transparencia en las donaciones y la prohibición de las procedentes de fundaciones o asociaciones subvencionadas con dinero público.
La iniciativa ha partido de ERC y su portavoz, Joan Ridao, ha celebrado el consenso de todos los partidos -que han consensuado el texto final- por haber escuchado algunas de las reclamaciones del movimiento del 15-M, la de pedir una democracia más transparente y participativa.
"Hace falta más política que nunca ahora, no hay nada malo en que el Parlamento escuche este aldabonazo crítico", ha dicho Ridao, quien ha recordado que la iniciativa pide al Ejecutivo que remita en el actual periodo de sesiones el proyecto de ley de acceso a la información pública que ha prometido en varias ocasiones.
EL PP DICE QUE "LA ÚLTIMA PIRUETA" DEL PSOE ES QUERER ENCABEZAR LAS MANIFESTACIONES QUE LE CRITICAN
Por su parte, la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, denunció hoy como "la última pirueta" del Gobierno socialista su supuesta intención de poner al PSOE a la cabeza de las manifestaciones del movimiento del 15-M, que, según ella, van precisamente contra las políticas del Ejecutivo.
En rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces, Sáenz de Santamaría arremetió contra el Gobierno por "abusar de la paciencia" de los españoles al pedir, a su juicio, más tiempo para llevar a cabo unas reformas que no han sido capaces de realizar, y lamentó su "debilidad", "incoherencia" e "incapacidad" para sacar a España de la crisis.
Sobre las manifestaciones en sí, la portavoz del PP valoró la tranquildad, "con alguna excepción", con la que se desarrollaron el pasado domingo, pero recordó a Rubalcaba "su obligación de hacer cumplir la ley". Además, relacionó su petición de una democracia más participativa con la enmienda de sustitución que ha registrado su grupo a la propuesta de ERC de mayor transparencia institucional.
CiU advierte a Zapatero: o hace reformas de verdad o convoca elecciones
Por su parte, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, ha estimado hoy que "la gran mayoría de los indignados está en casa", no protestanto en la calle, y ha recordado que su preocupación es el paro, por lo que ha dado un consejo al Gobierno: "o hace reformas de verdad o convoca elecciones".
En rueda de prensa tras la reunión de la Junta de portavoces de la Cámara Baja, Durán ha hecho hincapié en que la situación económica exige reformas "profundas" y ha advertido al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, de que si no está interesado en iniciarlas o no se ve capaz de hacerlo, debe convocar los comicios.
Sobre las protestas organizadas por el movimiento del 15-M, ha asegurado que su partido es consciente de que "hay causas que justifican el malestar social" debido a la angustia que genera la crisis y se ha mostrado sensible ante algunas de sus preocupaciones, pero ha cuestionado varias de sus iniciativas.
CiU, ha dicho, nunca apoyará una ley electoral basada en una circunscripción única y tampoco está de acuerdo con su defensa de una escuela única, pública y gratuita, ya que considera que, junto a ese modelo, los padres tienen derecho a escoger una escuela con ideario propio.
Tras defender el actual sistema institucional, Durán ha insistido en la necesidad de reformas que den flexibilidad a los empresarios para crear empleo, algo que, a su juicio, no hace la reforma de la negociación colectiva.
Es consciente de que ideológicamente algunos de los manifestantes y acampados del movimiento 15-M estarán en contra de estas propuestas, pero Durán ha recalcado que las reformas que propone CiU buscan crear empleo y que el paro es la principal preocupación de los ciudadanos, la mayoría de los cuales no protesta en la calle.