En libertad dos de las abogadas detenidas por el 'frente de cárceles' de ETA

  • El juez Velasco tomará declaración este martes a seis de los detenidos en la operación

Dos de las abogadas detenidas en la Operación Mate, contra el denominado frente de cárceles de ETA, han quedado en libertad, según han informado fuentes jurídicas. Se trata de las letradas Arantza Aparicio y Haizea Zilueaga, que fueron arrestadas ayer en esta operación desarrollada por la Guardia Civil en el País Vasco, Navarra y Madrid.

Las fuentes jurídicas consultadas no han podido precisar si las dos letradas han quedado en libertad con o sin cargos. Otros cinco de los detenidos en esta operación, entre ellos Ainhora Baglietto (abogada del etarra Josu Uribetxebarria Bolinaga, en libertad condicional por un cáncer terminal) pueden ser puestas esta tarde a disposición judicial en la Audiencia Nacional, según otras fuentes jurídicas.

EL JUEZ VELASCO TOMARÁ DECLARACIÓN

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco tomará declaración esta tarde a cinco de los 16 detenidos en la conocida como 'operación Mate', entre ellos los tres abogados que debían representar a 19 acusados en el juicio contra dirigentes de Batasuna, Acción Nacionalista Vasca (ANV) y Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) cuyo comienzo estaba previsto para este lunes: Amaia Izko, Eukene Jauregi y Haizea Ziluaga.

El magistrado interrogará también a otros tres letrados Arantza Aparicio, Onintza Ostolaza y a una de las personas pertenecientes a la organización de apoyo a los presos, Herrira, Nagore San Martín. El resto de los abogados arrestados -Ainhoa Baglietto, Alfonso Zenon Castro, Jaione Karrera Ciriza, Atxarte Salvador Navarro, Kepa Mancisidor Chirapozu, Aiert Larrarte Aldasoro y Ane Ituiño Pérez- declararán este miércoles.

El jueves pasarán a disposición juicial tres de los tesoreros de Herrira Francisco Javier Balda Araña, Jon Mintegiaga Oiarbide y Javier Carballido Ezkerra. La Guardia Civil detuvo este lunes a 12 abogados de ETA y otras 4 personas pertenecientes a la organización de apoyo a los presos de. Los letrados están acusados, además de integración en la banda, de delitos de blanqueo y delitos contra la Hacienda Pública.

En concreto, llegaron a ocultar al fisco unos ingresos superiores a 1.300.000 euros durante los años 2012 y 2013, procedentes de la asistencia jurídica a miembros del colectivo de presos de ETA (EPPK por sus siglas en euskera), según informa Interior.

El Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz precisó que estos gastos fueron sufragados por Herrira. De hecho, 4 de los 16 detenidos por formar parte del denominado 'frente de cárceles' son miembros de Herrira que ejercían labores de tesorería dentro de esta organización que tiene suspendidas sus actividades por decisión judicial.

Los detenidos como tesoreros de Herrira gestionaban los mismos recursos económicos que las ilegalizadas Gestoras Pro Amnistía y Askatasuna, además de utilizar las mismas técnicas, hasta el punto de asumir sus deudas pasadas y continuar su actividad. Entre sus funciones se encontraban la de efectuar los pagos a los letrados que formaban parte del colectivo de abogados por las actividades que realizaban.

Los arrestos tuvieron lugar en diferentes localidades del País Vasco, Navarra y Madrid y se han realizado diversos registros en domicilios y locales utilizados para el desarrollo de las actividades ilícitas que realizaron entre los años 2012 y 2013.

Entre los lugares registrados se encuentra la sede del sindicato abertzale LAB en Bilbao.La operación ha supuesto la desarticulación del entramado financiero que sustentaba económicamente al colectivo de abogados (BL) y supone también la práctica desaparición de la estructura utilizada por ETA para mantener la voluntad de los presos bajo las directrices de la banda.

La Guardia Civil considera que los abogados detenidos formaban una estructura organizada que aprovechando la cobertura que les otorga su actividad profesional, ejercían sus funciones siguiendo las directrices marcadas por la banda terrorista, anteponiendo, de esta manera, los intereses de ésta a los de sus defendidos.

BUSCABAN IMPEDIR DISIDENCIAS

En el marco de estos trabajos participaban activamente en el mantenimiento del adoctrinamiento ideológico e informaban permanentemente a la dirección de la banda de la situación personal, jurídica y del compromiso de los presos con los postulados de la banda. Asimismo, trasladaba a los presos las directrices e instrucciones de la propia ETA. Toda una labor encaminada a prevenir posibles disidencias internas.

La Operación Mate es fruto de distintas líneas de investigación. Unas derivan del análisis de la documentación intervenida en los registros efectuados en anteriores operaciones contra las diferentes estructuras del "frente de cárceles" y otras son consecuencia de investigaciones paralelas.

La documentación intervenida en anteriores operaciones ha permitido determinar que las actividades para mantener a los presos bajo la disciplina de ETA se combinaban con una acción en el exterior sobre sus familiares mediante un entramado de apoyo social a favor de los mismos, que se veía complementada con medidas económicas y asistenciales.

RONDAS DE CONTROL EN UN 95 POR CIENTO DE CARCELES

Para desarrollar las funciones asignadas, el colectivo de abogados utilizaba las llamadas "rondas de control a los presos de ETA", en las que los letrados visitaban a los miembros de la banda en prisión y aprovechaban estos encuentros para "alimentarlos políticamente", trasladarles instrucciones, directrices y todo tipo de información.

De esta forma, los ahora detenidos llegaron a mantener anualmente contactos con la mayoría de los miembros de ETA en prisión. Realizaron visitas a más del 95 por ciento de los centros penitenciarios en los que hay internos de la banda.

En unos casos contactaron directamente con los presos y en otros lo hicieron a través de los denominados "responsables de cárceles", es decir, aquellos presos de ETA designados por la organización terrorista para ejercer el control y dirección de los reclusos en cada prisión.

En definitiva, la Guardia Civil considera que el colectivo de abogados es un elemento fundamental para la transmisión de información entre ETA y sus militantes en prisión. Por ello, constituye un baluarte para garantizar la cohesión y el mantenimiento de la disciplina interna del EPPK.

En este sentido, cabe destacar que estas funciones están exclusivamente dirigidas a los presos de ETA y a los de las organizaciones de apoyo que se mantienen bajo la disciplina de la organización terrorista y pertenecen al EPPK.

La 'operación Mate' complementa las realizadas por la Guardia Civil en septiembre de 2013 y enero de 2014 contra otras estructuras del Frente de Cárceles de ETA, Herrira y el KT-KoordinazioaTaldea. A esto habría que sumarle la primera gran operación de los últimos años contra los abogados desplegada en abril de 2010.