Las nubes impidieron ver cómo se alineaba el Teide con la Luna en su eclipse

Las nubes que envolvían hoy el parque nacional del Teide impidieron observar cómo la sombra del volcán se alineaba con la de la Luna en su eclipse total, aunque la retransmisión que del fenómeno hizo en Internet el Instituto de Astrofísica de Canarias fue un éxito, con más de cien mil entradas.

Así lo manifestó el investigador del IAC Miquel Serra, promotor de la asociación científico cultural Shelios que, junto al grupo Cíclope de la Universidad Politécnica de Madrid, retransmitieron en directo el eclipse desde el Parque Nacional del Teide.

La asociación cultural Shelios organizó además una expedición para observar el fenómeno a 3.200 metros de altura, en el mirador de Pico Viejo, en espera de observar, minutos antes de la salida del Sol, una imagen única: la sombra del Teide apuntando directamente a la luna eclipsada en una alineación casi perfecta.

Este doble espectáculo del cielo no se observaba en Tenerife desde 2001 pero, desgraciadamente, subrayó Miquel Serra, las nubes se situaron en el horizonte del parque nacional, lo que motivó que sólo se observase el eclipse en parte.

Los investigadores comenzaron a montar los telescopios y los equipos necesarios para retransmitir el fenómeno por Internet a las 19:00 horas del lunes, lo que consideran "gratificante" por el interés despertado por la difusión en la red, en la que además se dan charlas de astronomía de las que "siempre queda algo" en el público.

Entre otros detalles, la explicación del fenómeno: el eclipse de luna total se produjo porque la Tierra se interpuso por espacio de algo menos de dos horas entre el Sol y el satélite, que se halla en fase de plenilunio o luna llena.

La sombra de nuestro planeta fue poco a poco ocultando al satélite hasta taparlo por completo y en Canarias esto se produjo a las 07:40 horas de la mañana.

Según manifestaron fuentes del IAC, la única particularidad de este fenómeno residía hoy en "la imagen única" que finalmente evitaron las nubes, la de ver la sombra del Teide sobre la atmósfera apuntando directamente a la Luna eclipsada. Además el IAC precisó que en un eclipse total de Luna, ésta no desaparece por completo pues los rayos del Sol, refractados en la atmósfera terrestre, pueden incidir e iluminar la superficie lunar que se percibe en tonalidades rojizas desde la Tierra.

También señalaron las fuentes que cada atardecer y amanecer, el pico más alto de España "regala a habitantes y visitantes la imagen de su sombra proyectada sobre la atmósfera". Si, además coincide con la luna llena, esta sombra aparece cerca del satélite, un suceso que se convierte en excepcional sólo cuando la luna abandona su clásico tono blanco por el color rojizo que le otorga el eclipse. "El fenómeno se vivió durante el eclipse del 9 de enero de 2001 y habíamos tenido que esperar una década para presenciar, de nuevo, el espectáculo", que finalmente frustraron las nubes, explica el investigador del IAC Miquel Serra-Ricart.

Una vez pasado el eclipse, los miembros de Shelios se concentran en los preparativos para el viaje que tienen previsto realizar en agosto de 2011 a Groenlandia para observar auroras boreales, fenómeno que también piensan retransmitir por Internet.