Los buzos tratan de estabilizar el 'Santa Ana' para acceder a su interior

  • Los buzos realizan tres inmersiones sin poder acercarse al Santa Ana

Los buzos de Salvamento Marítimo y del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil no han podido acercarse hasta el pesquero hundido frente al Cabo Peñas en ninguna de las tres inmersiones que han hecho a lo largo del día, por la falta de estabilidad del pecio y escasa visión. Los equipos de salvamento creen que en el interior del barco pudieron quedar atrapados los seis miembros de la tripulación que permanecen desaparecidos desde el lunes.

Buceadores de Salvamento Marítimo hicieron una inmersión por la mañana de 40 minutos y otra por la tarde, de media hora, pero en ningún caso pudieron llegar a acercarse al barco, porque la visibilidad sigue siendo "malísima", han informado fuentes de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil.

Los dos buceadores del GEAS que también descendieron por la tarde tampoco pudieron hacerlo por las condiciones que presentaba el mar y tuvieron que salir del agua antes de lo esperado sin acercarse al barco.

No obstante, los submarinistas sí que han podido observar el fondo marino para localizar los principales bajos de la zona y estudiar el terreno sobre el que descansa la popa del arrastrero portugués.

Con la visibilidad y estado que presentaba hoy el mar, no ha sido posible llevar a cabo el plan previsto para estabilizar el barco, que se mueve continuamente por estar situado justo en la rompiente de las olas con las formaciones rocosas de la Erbosa, el islote contra el que chocó a media milla al norte del Cabo Peñas.

La operación, consistente en enganchar un cabo desde la proa del Santa Ana, que sobresale del agua, a uno de los barcos de salvamento que hay en la zona. Se intentará hacer de nuevo mañana.

La estabilización del barco es imprescindible, según las mismas fuentes, para que los buzos puedan trabajar con seguridad y acercarse hasta el pecio que tiene la popa asentada en el fondo marino con la proa hacia arriba en una inestable y peligrosa posición vertical.

A los buzos que desde el lunes trabajan en la zona se han sumado hoy doce más del Equipo de Buceo Técnico Avanzado a Gran Profundidad de los GEAS de la Guardia Civil, que dispone también de un robot de exploración que se empleará cuando mejore la visibiliadad.