Los diputados díscolos del PSOE, los que votaron NO a Rajoy en su investidura han presentado hoy sus alegaciones para evitar que el grupo socialista en el Congreso les impongan sanciones, que podrían llegar a los 600 euros. Alegan que votaron en conciencia y se ven respaldados por la Constitución. En el partido sigue la división en cuanto al momento en el que hay que celebrar el Congreso que defina el futuro del PSOE y la persona que lo dirigirán.