El exjefe militar de ETA Francisco Javier García Gaztelu, alias "Txapote", se negó hoy a participar en el juicio que la Audiencia Nacional ha celebrado por el intento de asesinato con coche-bomba del concejal del PSE en Arboleda (Vizcaya) Martín Martínez en enero de 2001 y dijo no reconocer la "legitimidad" del tribunal para juzgarle.
"Todo lo que tengo que decir ya lo he dicho", indicó en euskera al inicio del juicio oral, en el que comparte banquillo de los acusados con los presuntos etarras Ángel López Anta y Xabier Zabalo.
La presidenta del tribunal, la magistrada Ángela Murillo, envió a "Txapote" al fondo de la sala ante los gestos y las risas que compartió durante gran parte del juicio con López Anta y Xabier Zabalo.
El fiscal encargado del caso, Vicente González Mota, solicitó a la Audiencia Nacional que condene a "Txapote" a 32 años de cárcel, al atribuirle delitos de pertenencia a banda armada en grado de dirigente, asesinato en grado de conspiración y estragos en grado de tentativa.
El representante del Ministerio Público solicitó, asimismo, sendas penas de 28 años de cárcel para López y Zabalo, a los que acusa de los mismos delitos que a "Txapote" pero sin atribuirles el grado de dirigentes para la pertenencia a banda armada.
La defensa de los acusados solicitó que no se condene a los tres acusados por pertenencia a banda armada al alegar que ya han sido condenados por este delito en Francia. González Mota se opuso a este criterio al entender que las leyes francesas "no tienen el mismo reproche penal" que las española ante el delito de pertenencia.
VIGILANCIAS AL CONCEJAL
El fiscal sostiene que los acusados Zabalo y López formaban el "comando Bolueta" junto al también etarra Oscar Calaboza, ya condenado por estos hechos en el año 2004. Este grupo terrorista, cuyo responsable dentro de la dirección de ETA era "Txapote", desarrollaba, según el fiscal, "labores de información sobre posibles objetivos de acciones terroristas". Dentro de estas tareas, los presuntos etarras vigilaron a finales del año 2000 al concejal del PSE en Arboleda y suministraron la información a la cúpula etarra, que decidió llevar a cabo un atentado contra el edil.
"Txapote" suministró al comando un vehículo robado cargado con 60 kilos de explosivos. Calaboza, López y Zabalo se desplazaron con el coche a Arboleda a finales de enero de 2001 para perpetrar el atentado, pero no consiguieron localizar a Martín Martínez.
Los presuntos etarras decidieron colocar el coche-bomba en el Paseo del Puerto de Getxo (Vizcaya), frente a la sede social de la compañía "Seguros Bilbao", pero no lograron encontrar aparcamiento. Finalmente, los acusados aparcaron el coche frente a un bloque de viviendas y alertaron a la Policía Municipal.
SUMINISTRO DE BOMBAS
López y Zabalo, si bien se negaron a contestar a las preguntas del fiscal, sí que respondieron a las cuestiones planteadas por sus defensas para negar tajantemente haber participado en los hechos.
Zabalo, cuyas huellas fueron encontradas en la carcasa del artefacto explosivo, explicó que "trabajaba en eso" y que ya ha sido condenado por suministrar bombas a los comandos. Aun así, no explicó por qué sus huellas fueron halladas también en un periódico que se encontró en el interior del coche-bomba y se limitó a decir que no participó en la acción terrorista.
López, por su parte, aseguró que no formaba parte del comando y que no tuvo nada que ver con el intento de atentado. En este sentido, dijo que ni siquiera conoce al concejal.
En el juicio compareció como testigo el miembro del "comando Bolueta" Oscar Calaboza, quien dijo no recordar ningún detalle de su participación en el intento de atentado. "Soy miembro de ETA y estoy orgulloso de ello", dijo.