El Pleno del Senado aprobó este jueves la proposición de reforma del Tribunal Constitucional con los únicos votos del PP y con la oposición de todos los demás grupos, cuyos vetos, enmiendas y votos particulares fueron rechazados. Sobre el debate sobrevoló en todo momento la declaración del presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, como imputado por la consulta soberanista, coincidiendo también con los 75 años del fusilamiento de su antecesor Lluis Companys.