Esta semana, Pedro Sánchez ha cumplido al frente del Partido Socialista sus primeros 100 días; el tiempo que se suele respetar antes de empezar las criticas a cualquier líder. Y antes de que los cumpliera ya han comenzado los "peros" a su gestión desde personas del pasado y del presente del PSOE.
100 días en que Sánchez ha cambiado la comunicación oficial del PSOE, con gestos como el de entrar en directo en el programa Sálvame, de Telecinco, y otras medidas de han marcado un nuevo estilo, como la exigencia de mayores incompatibilidades para la actividad parlamentaria y la prohibición de que sus diputados puedan cobrar otras remuneraciones por acudir a tertulias, dar clases en la universidad o por ejercer la abogacía.
Pero estos 100 días no han estado excento de polémicas y discrepancias en el seno del partido. Así, la todopoderosa Susana Díaz ya ha levantado la voz y esta semana ha marcado distancias con el nuevo líder del PSOE, sobre todo, a raíz de algunos de los anuncios desafortunados realizados por Sánchez. Entre ellos, su idea de que las víctimas de la violencia de género tuvieran funerales de Estado análogos a los de las víctimas de ETA, o sus declaraciones en ponían en cuestión la existencia del Ministerio de Defensa.
Susana Díaz, así, evitó asegurar que daría su respaldo a Pedro Sánchez en las primarias para la candidatura a la presidencia del Gobierno. La presidenta andaluza dijera en una entrevista que hay cosas que comparte con Sánchez y otras no y que tienen "estrategias" de comunicación distintas, el líder del PSOE ha insistido en que no hay disensiones entre ambos. Unas declaraciones interpretadas como críticas a la gestióndel actual secretario general, para quien el respaldo que él tiene que recabar es el de los militantes.
No obstante, Sánchez, ha negado que existan discrepancias con Díaz y ha restado importancia a la postura expresada por Susana Díaz.
A su juicio, "en lo esencial, que es en la estrategia política", están "absolutamente en sintonía". "No hay que buscar donde no hay. Hay apoyo cerrado y mutuo entre Susana y yo", ha remarcado.
Como ejemplo de sus coincidencias, ha puesto el caso de las expulsiones de los militantes socialistas que usaron tarjetas opacas en Caja Madrid, la postura sobre Cataluña y la defensa de la reforma constitucional.
Ha opinado que lo relevante para los ciudadanos no son las "cuestiones de matiz o si hay diferencias" entre Sánchez y Díaz, sino que los políticos se dediquen a trabajar, a defender los derechos de la gente y a "denunciar las cosas que está haciendo el Gobierno del PP".
LA DIRECCIÓN DEL PSOE SUBRAYA LA "SINTONÍA ABSOLUTA" ENTRE SÁNCHEZ Y SUSANA DÍAZ
El secretario de Organización del PSOE, César Luena, asegura que no existen tensiones entre el secretario general, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, sino al contrario, "sintonía absoluta, coincidencia en el fondo, en la estrategia, apoyo mutuo", y no solo con ella sino con todos los dirigentes.
Luena aseguró que existe en el partido un "estado de confianza" generalizado en la dirección federal por la sensación de que "las cosas se están haciendo razonablemente bien, con algún fallo, con cosas que se pueden hacer mejor".
Hay una "muy buena costumbre" en el PSOE, explicó, y es que sus dirigentes son "muy autoexigentes, muy autocríticos", y eso a veces se interpreta como tensión interna.
Luena dejó claro que habrá primarias para elegir al candidato a la Presidencia del Gobierno, y aunque se presenten más aspirantes, el suyo es Pedro Sánchez.
