Ruiz-Mateos, en busca y captura: "No tengo miedo a estar entre rejas"

  • La juez acusa a Ruiz-Mateos de "reírse de la justicia" valiéndose de dolencias no acreditadas

El empresario jerezano José María Ruiz-Mateos, en busca y captura por orden de una juez de Palma por no comparecer el pasado viernes en su juzgado, ha asegurado hoy que la magistrada está haciendo el "ridículo" y ha reconocido que no tiene miedo a estar "entre rejas" porque ya "nada" le asusta. Ruiz-Mateos, que ha recibido a los medios de comunicación en el despacho de su casa de la lujosa urbanización de Somosaguas, a las afueras de Madrid, ha lamentado que se le considere un "peligro para la sociedad" y ha criticado que la Justicia no quiera descubrir "la verdad".

Vestido con un traje beige, corbata roja y zapatillas deportivas, el empresario ha explicado que no acudió al juzgado por una lesión que sufre en un pie y que está dispuesto a comparecer ante la juez cuando así se le requiera, aunque no cree que vaya a servir para nada porque "todo es mentira". "Voy a ir pero no va a servir para nada, parece que se trata de un asesinato y yo ya estoy cansado", ha dicho.

Tras recordar que ha intentado ingresar en prisión de forma voluntaria hasta en cinco ocasiones y que se metería en la cárcel "si pudiera", Ruiz-Mateos ha afirmado que se siente "detenido siempre" y como si fuera culpable de un asesinato. "Me da pena la Justicia. Lamento la Justicia que tiene hoy España. La jueza está haciendo el ridículo con este tema", ha subrayado.

En cualquier caso, el empresario jerezano ha insistido en que sigue buscando fórmulas para pagar a todos sus acreedores porque, añade, "es lo único que me preocupa".

AUTO DE LA JUEZ

Una jueza de adscripción territorial de Palma de Mallorca ha ordenado la busca y captura del empresario jerezano José María Ruiz-Mateos, después de que un informe forense haya determinado que la fractura que alegó en el tercer dedo del pie derecho no le imposibilita a acudir a los juzgados para ser interrogado en calidad de imputado por una presunta estafa de 13,9 millones de euros.

Así, la juez Maria Pascual le ha emplazado a declarar de nuevo el 23 de agosto, según un auto, en el que se pone de manifiesto que el médico forense que examinó a Ruiz-Mateos llegó a la conclusión de que la rotura del dedo era de carácter leve y, además, señala que está desarrollando un "curso evolutivo satisfactorio".De este modo, el médico forense indica que la rotura del dedo tan sólo representaría un ligero dolor teniendo en cuenta que la radiología que se la ha practicado al empresario jerezano pone de manifiesto que no es tal la gravedad.

Cabe recordar que el pasado viernes, la jueza de refuerzo del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma dictó una providencia por la que ordenó que un médico forense examinar a Ruiz-Mateos y elaborase un informe médico sobre el mismo, después de que ese día, el empresario jerezano no compareciera ante este Juzgado a declarar en calidad de imputado, en relación a una querella por estafa, presentando para ello un informe médico, que revelaba que se había roto el tercer dedo del pie derecho.

En esta línea, la jueza dirigió un exhorto al Juzgado de guardia del partido judicial en el que reside el empresario para que se cumpla lo ordenado en la providencia.

UNA ROTURA DE HACE TIEMPO

Precisamente, la magistrada decidió el viernes suspender por motivos de salud la declaración de Ruiz-Mateos, tras aceptar el parte médico original entregado por su abogado, Marcos García Ortega, que revela la rotura del citado dedo. El letrado precisó en la puerta de los Juzgados que la rotura del dedo "no es de hace unos días, sino de hace tiempo", al tiempo que manifestó que el médico ha recomendado a Ruiz-Mateos reposo y que evite moverse.

Ruiz-Mateos tenía que haber comparecido a las 10.00 horas en calidad de imputado, en relación con una querella por presunta estafa que se tramita en dicho Juzgado y que fue presentada por el empresario Francisco Miralles al que en 2006 compró un hotel en Mallorca, si bien su abogado Marcos García Ortega ha entregado a la magistrado un parte médico original sobre la rotura del dedo, con el fin de justificar la ausencia del empresario.

El empresario envió el pasado jueves por la noche un fax al Juzgado con un parte médico asegurando que no podía trasladarse a Palma y, en esta línea, su letrado explicó a los medios que su cliente estará convaleciente durante un mes.

VENTA DE UN HOTEL

Se da la circunstancia de que hace unos días la representación procesal del imputado solicitó no personarse ante el Juzgado por motivos de salud, si bien el pasado jueves presentó un escrito comunicando que el viernes acudiría a la cita judicial en Palma. Concretamente, la sociedad Inversiones Grupo Miralles, que el pasado año se querelló contra Ruiz Mateos y sus hijos por una presunta estafa de 13,9 millones en la compraventa del hotel Eurocalas, amplió su denuncia al atisbar indicios de que la sociedad que avaló la operación incurrió en un delito de alzamiento de bienes para evitar posibles embargos.

Ello, según alegaba el querellante, por vender el hotel Cervantes de Torremolinos, perteneciente a los Ruiz-Mateos, a la mercantil Clesa --también propiedad de los denunciados--, "obstaculizando" así su posible embargo.