El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha propuesto hoy para prevenir la corrupción que las empresas no puedan dar dinero a los partidos políticos y que las implicadas en casos de financiación irregular no puedan contratar con la administración.
Rubalcaba también ha propuesto crear una unidad de asuntos internos del Estado compuesta por "hombres de negro incorruptibles" que puedan entrar por sorpresa en los despachos de los cargos públicos y que la Audiencia Nacional sea la competente para investigar los casos de corrupción.
El líder del PSOE ha expuesto estas medidas en su intervención en la clausura del Congreso del PSE en el Palacio Euskalduna de Bilbao.
Además de desgranar sus planes contra la corrupción, Rubalcaba ha emplazado al jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, a desvelar las cuentas del PP de los últimos 20 años, al considerar insuficiente que informe de sus emolumentos personales, de los que ha dicho con ironía: "Madre del cielo, no le ha ido mal en estos añitos".
Rubalcaba ha asegurado que las medidas que plantea el PSOE buscan "prevenir, investigar, corregir y dar transparencia a la vida política" a la vista de lo descubierto con el caso del extesorero del PP Luis Bárcenas y las informaciones sobre supuestos pagos ilegales a cargos de este partido.
En opinión de Rubalcaba, urge poner en marca actuaciones como éstas al alertar de que "la mezcla de corrupción y crisis es mortal para el sistema democrático".
El dirigente socialista ha justificado su solicitud de que las empresas no den dinero a los partidos en que el cambio que se acometió en la ley para que las donaciones fueran más transparentes "no ha funcionado".
Por ello, ha defendido "ir más allá" y que directamente se prohíba dar dinero a los partidos, "ni privado, ni público, ni transparente, ni no transparente".
"Que las empresas se dediquen a los suyo y no pongan un euro a los partidos", ha zanjado.
También en relación con las empresas, ha planteado que aquéllas que estén implicadas en casos de corrupción no puedan contratar con ninguna administración pública mientras dure la sentencia del caso.
"Hay que castigar a los políticos que se corrompen, pero ¿por qué no castigamos también al corruptor?. Al que se corrompe y al que corrompe", ha sostenido.
Para fortalecer el control del Estado en la persecución de estos delitos, ha propuesto crear una oficina antifraude con "hombres de negro" que puedan "entrar en los despachos sin avisar".
Esta "unidad de asuntos internos", como la ha definido, estaría integrada por "personas del máximo nivel e inspectores incorruptibles" que puedan ir aleatoriamente a las administraciones y "ver por sorpresa lo que hay" para prevenir.
La cuarta medida por la que aboga el PSOE es que la Audiencia Nacional se haga cargo de todos los asuntos ligados con la corrupción política.
De este modo, ha apuntado Rubalcaba, se evitaría que los procesos judiciales se alargasen y que hubiese sentencias "dispares" entre los diferentes tribunales.
"Darle el máximo nivel, celeridad y homogeneidad", ha resumido el líder del PSOE al referirse al protagonismo que debería adquirir la Audiencia Nacional.
Rubalcaba ha hecho hincapié en que lo importante para evitar nuevos casos como el de Bárcenas es prevenir y establecer más controles con el fin de que "la gente que quiera corromperse tenga miedo a que le pillen y que la pueden pillar sin que se entere".
Respecto a la publicación en la página web de la Moncloa de las ganancias de Rajoy, lo ha visto insuficiente, al considerar que lo imperioso es que el PP dé a conocer cuál fue su financiación durante los 20 años en que Bárcenas estuvo al cargo de las cuentas del partido.
"El tema es qué han hecho con la financiación irregular", ha acusado al PP.
Rubalcaba ha advertido de que la crisis "política y moral" que afecta al PP sólo se empezará a solucionar cuando la gente "sepa qué ha pasado con los dineros de Bárcenas".
"Se trata de que digan la verdad de lo que hicieron", ha insistido.
Rubalcaba ha ahondado en que los populares están inmersos en un "caso de corrupción gravísimo" y que el caso Bárcenas no es más que una parte de la trama Gürtel que apunta "al propio núcleo del PP".
En el "corazón" de esta trama, también ha situado a Jesús Sepúlveda, exmarido de Ana Mato, al que también ha emplazado a que publique sus cuentas.