El Cuerpo de Mossos d'Esquadra, la Guardia Urbana de Barcelona, la Policía Local de Cambrils (Tarragona) y servicios de emergencia han recibido hoy la medalla de honor del Parlament, en la categoría de oro, por su intervención en los atentados yihadistas en Cataluña del pasado 17 de agosto.
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, han encabezado un acto con amplia representación de miembros de esos Cuerpos y de distintas fuerzas políticas, así como las alcaldesas de Barcelona, Ada Colau, y de Cambrils (Tarragona), Camí Mendoza.
Asimismo, han asistido los expresidentes catalanes Artur Mas o José Montilla; y los expresidentes del Parlament Joan Rigol y Ernest Benach.
Los atentados en La Rambla de Barcelona y en el municipio costero de Cambrils, a manos de una célula yihadista, provocaron 16 muertos y más de 130 heridos.
Además de los tres cuerpos policiales catalanes galardonados por su "respuesta inmediata sobre el terreno tras los atentados", también se ha premiado a varios servicios de emergencias: Protección Civil, Sistema de Emergencias Médicas, Centre de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona, Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Cataluña, Bomberos de Barcelona, Bomberos de la Generalitat y Cruz Roja.
Galardón que la Mesa del Parlament acordó por unanimidad, a propuesta de Forcadell, aunque también se hizo "extensivo el agradecimiento y reconocimiento al resto de cuerpos de seguridad".
Esa decisión no contentó a partidos como Ciudadanos, el Partido de los Socialista de Cataluña (PSC) o el Partido Popular de Cataluña (PPC), que si bien apoyaron y aplaudieron la concesión de la medalla a Mossos, Urbana y policía local de Cambrils, criticaron que no se incluyera en la medalla a la Policía Nacional y la Guardia Civil.
Pese a ello, el acto de hoy en el Parlament ha contado con la presencia de representantes de prácticamente todos los grupos parlamentarios, como Lluís Corominas (JxSí), Inés Arrimadas (Cs), Miquel Iceta (PSC), Lluís Rabell (SíQueEsPot), Esperanza García (PP) y el diputado no adscrito Germà Gordó, aunque no así de la CUP.
También los miembros de la Mesa del Parlament y los consellers del Govern; el subdelegado del Gobierno en Barcelona, Emilio Ablanedo; y representantes de distintas comunidades religiosas.
"El día 17, el terrorismo y la violencia irrumpieron de forma dolorosa y dramática en nuestro país. No queremos que vuelva a pasar nunca más, ni aquí ni en ningún lugar. Queremos que sea última vez", ha dicho Puigdemont, que ha agradecido a los Cuerpos su "actuación ejemplar" y su "respuesta rápida, profesional, coral y coordinada".
Por su parte, Forcadell ha elogiado la labor "extraordinaria" de esos servicios públicos para "salvar vidas y minimizar el ataque", y ha hecho "extensivo el reconocimiento al resto de Cuerpos y voluntarios".
Además, ha recordado el lema ciudadano "No tinc por" (No tengo miedo), que expresa que "no renunciaremos a las libertades que definen nuestro país. No estamos dispuestos a ser prisioneros del miedo. Ninguna amenaza nos hará renunciar a la voluntad de vivir en libertad, a ser como somos y a guiarnos siempre por el respeto absoluto de los derechos humanos".
En nombre de todos los galardonados ha intervenido el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, que ha agradecido el reconocimiento y la "mirada generosa y justa" de la sociedad catalana a sus servidores públicos, en un discurso en que ha recordado los nombres de todos los fallecidos y, sobre todo, el de Xavi, el niño de tres años de Rubí (Barcelona), que murió en el atentado en La Rambla.
"El día 17 se llevó 16 vidas, 16 personas, 16 proyectos y 16 sueños", ha lamentado. "Tenemos la responsabilidad como sociedad de poner voz a sus silencios, no olvidar que no estuvimos a tiempo y de mejorar, trabajando desde el rigor, humildad y exigencia. También desde la defensa de nuestra profesionalidad, la bondad de nuestras acciones y la honestidad de nuestros hombres y mujeres".
Unas palabras con las que Trapero ha reivindicado el trabajo de los Cuerpos de seguridad y emergencias, en concreto de los Mossos d'Esquadra, después de la polémica generada posteriormente sobre si recibieron meses antes un aviso de que el yihadismo pretendía atacar en La Rambla de Barcelona.
El acto ha finalizado con el himno de Cataluña, "Els Segadors", interpretado por el Cor de Cambra del Conservatori del Liceu de Barcelona, tras el cual se ha podido ver al presidente de la Generalitat y a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, conversando juntos durante varios minutos, en un momento en el que se debate el papel del consistorio barcelonés en el referéndum independentista del 1 de Octubre (1-O), suspendido por el Tribunal Constitucional.
PUIGDEMONT REIVINDICA EL PAPEL DEL "VOLUNTARIADO" DURANTE LOS ATENTADOS
Por su parte, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha destacado el papel de los "servidores públicos" que reaccionaron durante los atentados ante la violencia de los terroristas, y también ha agradecido la lucha por los valores democráticos de los presidentes de la Generalitat --ha citado a José Montilla y Artur Mas-- y de los consellers que le han precedido.
Lo ha dicho en el acto de entrega de la Medalla de Honor del Parlament a los Mossos d'Esquadra, las policías locales de Cambrils y de Barcelona y los Servicios de Emergencias, una distinción que se decidió tras los atentados de este verano en la capital catalana y Cambrils (Tarragona).
Puigdemont ha dicho que los hechos de agosto no fue la primera vez que el terrorismo sacudía Catalunya, pero ha prometido que toda la sociedad trabajará para que se la última: "Queremos que no vuelva a pasar nunca más aquí ni en ningún lugar".
Ha pedido "plantar cara y superar todas las pruebas por dolorosas que sean", y ha dicho que aquel día no solo tuvieron un papel relevante los cuerpos de seguridad y de emergencias, sino también la ciudadanía con su acción de voluntaridado.
Ha considerado que este voluntariado es "una poderosa arma movilizadora de espíritus" y también ha rememorado a las víctimas de aquellos hechos, a quienes ha prometido que dejarán un recuerdo imborrable.