El martes, primera cita decisiva en la nueva agenda política. El Senado debatirá los presupuestos en un escenario contrario al que se aprobaron en el Congreso. Pedro Sánchez se comprometió en la moción de censura a apoyar su tramitación. Cinco de sus aliados en la votación, sin embargo, han presetnado vetos a a totalidad. Incluso el PP podría introducir enmiendas parciales a su propio presupuesto, que podrían afectar a las inversiones pactadas con el PNV. En todo caso, será la primera prueba de fuego para un gobierno con numerosos retos en el plano económico.