El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se reconoce como un político atípico, "un ministro de derechas raro, porque el Ibex no me quiere". Será porque, según explica en una entrevista con El Mundo en la que no deja títere con cabeza, los representantes de las 35 empresas que pertenecen al principal índice bursátil español no le han puesto en su cargo.