El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha constatado, coincidiendo con la Diada de Cataluña, que "la transición nacional catalana" ya ha empezado.
"La transición nacional catalana se está haciendo. En las mentes de la gente de Cataluña cala un sentimiento de mayor soberanía y libertad", ha indicado Mas tras el acto institucional del Govern y el Parlament en el parque de la Ciutadella de Barcelona.
Es una brecha entre Cataluña y el resto del estado que según Mas ha empezado, y, al menos en Lleida, se ha abierto del todo, después de que el presidente de la Diputación provincial, Joan Rañé (CiU), haya asegurado que "la respuesta clara --a las agresiones de Madrid-- pasa por la independencia".
La jornada se ha desarrollado con civismo, aunque la guerra de banderas la ha teñido: el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol (PP), ha sido abucheado por suspender el acto institucional y mantener la bandera rojigualda en la fachada del Ayuntamiento, mientras que en Vic, el equipo de gobierno liderado por Josep Maria Vila d'Abadal (UDC) ha decidido lucir una bandera independentista, lo que ha censurado el PP.
Los populares también han lamentado que en la ofrenda floral institucional en Barcelona, hubiese una bandera 'estelada' arriba del monumento a Rafael Casanova, algo que su líder en la capital catalana, Alberto Fernández Díaz, ha atribuido a la laxitud del nuevo gobierno municipal de CiU.
La líder del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, ha justificado que García Albiol suspendiera los actos oficiales porque la oposición le ha plantado y también ha lanzado un mensaje a Mas: que se centre en la crisis y no en "amenazas". RECORTES Y PACTOS
La oposición catalana ha puesto el acento en dos grandes cuestiones: ICV-EUiA y PSC han priorizado las sociales, lamentando el impacto de los recortes, mientras que los independentistas han reprochado a CiU sus pactos con el PP.
El aún presidente de ERC, Joan Puigcercós, ha lamentado que el Govern de CiU pacte con el PP, que "menosprecia" la Diada, mientras que Joan Laporta (DC) ha instado a la federación a posibilitar una moción de censura en Badalona para desalojar a Albiol de la alcaldía.
CiU ha optado por un mensaje contundente, y el presidente de su grupo en el Parlament, Oriol Pujol, ha asegurado que ni con un "ejército de garcias albiols", el Govern no va a rectificar su defensa a la inmersión ling~ística y al autogobierno.
Por otra parte, la ofensiva en contra del modelo educativo de inmersión ling~ística ha irrumpido en el acto institucional por la Diada que desde hace siete años organizan conjuntamente el Govern y el Parlament frente a la cascada del parque de la Ciutadella de Barcelona.
En su intervención, el escritor y 'enigmista' ling~ístico Mrius Serra ha recordado que el químico Pompeu Fabra, autor del primer diccionario de catalán, hace cien años defendía la educación en esta lengua: "Y esto que decía Fabra hoy lo llamamos inmersión ling~ística. Necesitamos más inmersión ling~ística para tener futuro".
Si en su discurso institucional por la Diada Mas aseguró que la reforma constitucional ha roto los consensos de la transición, Isidre Molas (PSC) ha indicado que estos se mantienen y que el espíritu que hizo posible la aprobación de la Constitución en 1978 sigue vigente.
También sobre la reforma constitucional, tanto Joan Herrera (ICV) como Josep Antoni Duran (UDC) han instado a Carme Chacón y a los otro 24 diputados del PSC en el Congreso a firmar para forzar que la modificación se apruebe por referéndum.
Otro grupo de encapuchados quema una foto del Rey y una segunda bandera española
Un grupo de unos cuatro jóvenes encapuchados ha irrumpido en el escenario de la manifestación independentista de Barcelona que se celebra con motivo de la Diada, y ha quemado una foto del Rey y una bandera española, la segunda que arde en la capital catalana este domingo.
Los hechos han ocurrido pasadas las 19.30 horas en el paseo del Born, en el escenario donde instantes antes se habían leído sus discursos los organizadores de la concentración.
Poco antes, otro grupo de encapuchados había quemado una primera bandera española cuando la manifestación se encontraba a la altura del passeig Lluís Companys, ante los antiguos juzgados.