El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo llegó hoy a la isla indonesia de Bali en el avión Airbus 310 de la Fuerza Aérea española en el que viaja y que sufrió una avería durante una escala técnica en Abu Dabi.
García-Margallo, que inicia en esta isla indonesia una gira por varios países de Asia y Oceanía, llegó al aeropuerto de Denpasar, la capital balinesa, a las 09.30 hora GMT. El avión en el que viaja el ministro sufrió una avería en la escala técnica que realizó en Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) que hizo abortar su despegue.
Según explicó el comandante el comandante de la aeronave, se descubrió en el aparato una anomalía "en el sistema automático de control de potencia del motor" que "no funcionó como debiera". La fuente agregó que el avión de la Fuerza Aérea española tuvo que abortar su despegue cuando estaba ganando velocidad en pista.
García-Margallo viaja a Indonesia, Samoa, Australia y Sri Lanka, donde participará en varios foros internacionales y mantendrá reuniones bilaterales para recabar votos a la candidatura de España a ser miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. La visita de García-Margallo se prolongará hasta el 7 de septiembre, jornada en la que está previsto que el ministro estará de vuelta en Madrid.
LA AVERÍA SE LOCALIZÓ EN UN SISTEMA DE CONTROL DE LA POTENCIA DE UNO DE LOS MOTORES
La avería que sufrió el avión oficial en el que viaja el ministro se localizó en un sistema automático de control de potencia de uno de los motores del aparato que traslada al dirigente hacia Bali (Indonesia). Según ha informado el Ejército del Aire en un comunicado, la propia tripulación solventó el imprevisto. Sobre el sistema en el que se ha detectado la avería, el comunicado informa que sólo es exigible en vuelos transoceánicos, "sobre grandes extensiones de agua".
El avión Airbus A-310 del 45 Grupo del Ejército del Aire, en el que vuela en su gira asiática Margallo tenía previsto aterrizar finalmente en Bali a las 11.35 horas en España.
SEIS AVERIAS EN NUEVE MESES
Este es el sexto incidente que sufre un aparato perteneciente a la flota de la Fuerza Aérea española en nueve meses, después de las cuatro averías que se registraron en los Airbus A310 en viajes del Príncipe de Asturias y de la Reina a América Latina, así como el fallo que tuvo lugar antes del regreso a España del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de Irlanda el 7 de marzo o el Rey Juan Carlos antes de despegar de Kuwait hacia España el pasado 16 de abril.
El primer incidente tuvo lugar el pasado 25 de noviembre, cuando se detectó una avería en el sensor que provocaba un cortocircuito en uno de los 'flaps' del ala izquierda del avión. Dado que la reparación de la avería requería la colocación de un nuevo sensor cuya calibración requería varias horas, y dado que el otro A310 se encontraba en plena revisión programada, Don Felipe y la delegación de empresarios y periodistas que le acompañaban se quedaron en tierra.
Algo más de dos meses después, el 26 de enero, el Airbus que llevaba al Heredero a la Corona a Honduras para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente de aquel país realizó una escala técnica en República Dominicana y, tras partir de nuevo, tuvo que regresar por una avería en uno de los indicadores del filtro de aceite.
El tercer incidente se registró en uno de los Falcon 900 que debía trasladar a Rajoy de vuelta a Madrid desde Dublín tras asistir al Congreso del PPE. En aquella ocasión, poco después del despegue se iluminaron en cabina las luces de aviso de fallo REV UNLOCK y TRANSIT, que indicaban que la reversa del motor número 2 no estaba blocada y segura en la posición de plegada, lo que retrasó el regreso varias horas.
El cuarto fallo detectado en aviones encargados del traslado de autoridades tuvo lugar el 22 de marzo, cuando en el Airbus A310 en el que viajaba la Reina doña Sofía de vuelta a España procedente de Guatemala se detectó una avería similar a la que se registró en el avión de Rajoy. En esa ocasión, la demora también fue de varias horas.
Mientras, el último fallo hasta la fecha se produjo el 16 de abril cuando tras un análisis por parte de los técnicos, se detectó un problema con una válvula en el avión que trasladaba a don Juan Carlos del aeropuerto de Kuwait con destino a Valencia, donde presidió la final de la Copa del Rey de fútbol entre el Real Madrid y el Barça.