El dueño del asador de Marbella se declara insumiso y plantea crear una plataforma de hosteleros contra la Ley Antitabaco

  • Granados: "El Gobierno está creando un país en el que se restringen derechos y ahora quiere uno de soplones"
  • Agreden al dueño de una bolera cacereña tras pedir a un cliente que apague su cigarro

Cuarto día de aplicación de la Ley Antitabaco. Propietarios de bar que se declaran insumisos, otros que intentan mediar en peleas entre clientes y acaban agredidos, un tercero que destruye las maquinas expendedoras. El clima entorno a la nueva norma se enrarece cada vez más. El consejero de Presidencia de la CAM califica de impresentable que se anime a la delación, y critica al gobierno por convertir España en "un país de soplones".

Entre los incidentes que ha desatado la entrada en vigor de la ley destaca un enfrentamiento entre clientes de una bolera de la localidad cacereña de Montehermoso que se ha saldado con casi 20 puntos de sutura en la cara del propietario del bar, que previamente le ha pedido que apague su cigarro.

También cabe destacar el hecho que el propietario del Asador Guadalmina, de Marbella, que había anunciado su intención de no cumplir la ley, ha asegurado hoy que pondrá una denuncia contra la pareja de policías que ha identificado a los clientes que estaban fumando dentro del establecimiento.

En este sentido, la Junta de Andalucía estudia la tipificación del delito en el que ha podido incurrir el asador de Marbella que se ha negado a cumplir la "Ley antitabaco" y que ahora baraja transformarse en una sociedad gastronómica, en la que no tenga cabida la prohibición de fumar.

El propietario del Asador Guadalmina, José Eugenio Arias, ha manifestado su intención de aunar fuerzas, por lo que ha hecho un llamamiento al resto de los hosteleros del territorio nacional.

En caso de que le cerraran el local, ha dicho, se marchará de España y llevará su postura "a las máximas consecuencias", de forma que tampoco descarta acudir al Tribunal Constitucional, ya que, a su juicio, el Gobierno ha prohibido fumar por resultar incongruente la ley.

Además, ha agregado que, puesto que su restaurante -que advierte en varios carteles de que no aplicará esta normativa haciendo uso de lo que entiende como sus "derechos"- es un negocio privado, su propietario puede hacer lo que quiera dentro de él.

No es el único caso. Inspectores de la Conselleria de Sanidad han levantado acta contra un bar de Castellón en el que se permite fumar desde que ayer sus dueños se declararan "objetores" de la ley antitabaco porque, según dicen, sus ingresos descendieron entre el 75 y 80 por ciento los días que la aplicaron.

Así lo ha explicado uno de los propietarios del bar Espirit, Fernando Tejedor, quien ha asegurado que su decisión de incumplir la legislación es "firme" y se debe a que tanto para él como para su socio lo prioritario es "defender el negocio y más en época de crisis".

Los inspectores han levantado un acta en la que consta que el bar, situado en la avenida de Valencia de Castellón, está incumpliendo la legislación, después de comprobar que "la gente estaba fumando" en el local, "los ceniceros tenían colillas" y en las puertas hay carteles en los que se "indica claramente que el bar es para fumadores".

Al dueño del bar no le han "nombrado sanciones" ni le han explicado a cuánto ascenderá la multa, según ha dicho, pero asegura que resolverá la situación "como sea" y dejará que sus clientes fumen, como indica el letrero en las puertas del establecimiento, en el que se lee: "Acceso permitido a fumadores. Los no fumadores, bajo su responsabilidad".

Tejedor ha señalado que el 2 y el 3 de enero abrieron las puertas del local cumpliendo la legislación y detectaron que "la caja bajó entre un 75 y un 80 por ciento", mientras que "la luz, los pagos y las facturas vienen igual".

"No podemos sobrellevar todo esto, es un jaleo. Mi socio y yo decidimos que no quedaba otra alternativa que tirar para adelante. El bar lo hemos tenido lleno durante toda la mañana", ha explicado.

El propietario ha anunciado que están dispuestos a movilizar a más hosteleros e invitarles a que imiten su actitud, para lo que diseñarán un blog en el que "recoger firmas y todo lo que piensa la gente de la ley", y que saldrán "por la ciudad" con el objetivo de que los vecinos les apoyen y firmen en contra de la ley.

"No sabemos la respuesta que va a tener la iniciativa pero vamos a intentar que sea positiva, porque un momento de crisis como éste no es el adecuado para aplicar una ley así", ha afirmado, al tiempo que ha admitido que no fuma y que su compañero, que sí lo hace, lo suele hacer fuera del establecimiento.

Otros de los incidentes se produjo en el País Vasco, donde la Ertzaintza detuvo ayer en el Hospital de Cruces (Barakaldo, Vizcaya) a un hombre de 31 años tras insultar y amenazar a una enfermera que le llamó la atención por fumar dentro de las instalaciones sanitarias.

Al parecer, este hombre, que se encontraba ingresado en una de las plantas del hospital, había amenazado e insultado a una auxiliar de enfermería tras llamarle ésta la atención por fumar.

Al llegar la patrulla policial, el paciente adoptó una actitud agresiva con los agentes y tuvo que ser reducido y detenido.

Desde la Comunidad de Madrid, el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, ha manifestado que el Gobierno de España "está creando un país en el que se restringen derechos, en el que cada día hay más parados y ahora también quiere un país de soplones", en referencia a la llamada realizada desde el Ministerio de Sanidad para denunciar a aquellos ciudadanos que incumplan términos de la nueva legislación antitabaco.

Granados, que se opone "de manera personal" a esta nueva ley --"una restricción de libertades absolutamente impresentable", a su juicio,--, ha afirmado que rechaza "mucho más aún que se incentive el 'chivatazo'".

Asimismo, el consejero ha asegurado no tener constancia del número de denuncias presentadas en la Comunidad de Madrid, pero de todas formas, se ha opuesto frontalmente a que se los ciudadanos denuncien, ya que espera "que los ciudadanos no presenten ninguna".

"No me parece que sea una buena práctica eso de incentivar a que nos vayamos chivando y denunciando unos a otros", pues para Granados "no es ése el modelo de sociedad que debe buscar un Gobierno".

Sin embargo, Granados ha apuntado que al Ejecutivo nacional "le está saliendo muy bien esta jugada". "Estamos hablando del tabaco y no de los problemas que realmente interesan a los ciudadanos. No hemos hablado de paro, ni de inflación, ni de lo que nos ha subido ñel presidente del Gobierno José Luis Rodríguezí Zapatero la energía eléctrica, ni el gas ni el carburante", ha valorado.