El Gobierno ha dado hoy luz verde a la creación de la tarjeta sanitaria única individual e "interoperable", que permitirá la identificación del paciente en todo el territorio nacional, según acordaron el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas hace dieciocho meses.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha subrayado que esta medida es un "elemento básico para garantizar la sanidad" en España, además de contribuir "a un mejor servicio en todo el territorio nacional y a la racionalización".
El Consejo de Ministros ha aprobado un real decreto por el que se modifica el 183/2004, que regula la tarjeta sanitaria individual, que hasta ahora expedía cada comunidad.
Las actuales tarjetas se sustituirán con motivo de su renovación por cualquier causa y este proceso estará finalizado antes de cinco años en todo el territorio nacional, donde cuatro millones de españoles reciben atención sanitaria en una comunidad autónoma distinta a la suya.
Con el real decreto aprobado hoy, el Gobierno también cumple con la Ley de Cohesión y Calidad de 2003, que fija que los ciudadanos tienen derecho a recibir en cualquier comunidad autónoma asistencia en las mismas condiciones que en la suya de residencia.
DATOS QUE INCORPORAN
Las tarjetas sanitarias individuales tendrán un formato único e incorporarán una serie de datos básicos y comunes de cada usuario.
Esos datos son: la identidad institucional de la comunidad autónoma o entidad que la emite; los rótulos de Sistema Nacional de Salud (SNS) y Tarjeta Sanitaria; el código de identificación personal asignado por la administración emisora; el nombre y apellidos del titular; el código de identificación personal único del SNS y el código de la administración sanitaria emisora.
También podrán incorporar el número de DNI de su titular -en el caso de extranjeros, su número de identidad de extranjeros-, el número de la Seguridad Social, la fecha de caducidad o el número de teléfono de atención de urgencias sanitarias, además de incluir una fotografía del titular de la tarjeta.
Otra novedad es que en el ángulo inferior derecho de la tarjeta sanitaria se grabarán en braille, los caracteres "TSI" (Tarjeta Sanitaria Individual), a instancias de parte o de oficio en aquellas administraciones sanitarias que así lo prevean en su normativa.
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad establecerá los requisitos y estándares necesarios sobre los dispositivos que las tarjetas incorporen y las aplicaciones que las traten deberán permitir que la lectura y comprobación de los datos sea técnicamente posible en todo el territorio del Estado.
El formato único de la tarjeta permitirá también, de manera visible, la identificación del SNS, necesaria para el proyecto europeo de "interoperabilidad" de la información clínica y para la adecuada implantación de la tarjeta sanitaria europea, así como para la circulación de los pacientes por la UE.
Esta medida supone un paso más en la implantación del proyecto e-Salud, que incluye la receta electrónica y la historia clínica digital.
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha considerado en un comunicado que la unificación de las tarjetas es un "avance positivo", pero ha advertido de que "si no se arbitran fondos" para llevar a cabo su implantación, se quedará en una "declaración de buenas intenciones con escasos o nulos efectos prácticos".