El candidato de Izquierda Unida y Unidad Popular a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, aseguró este lunes que explorará "todas las vías posibles" para tener grupo propio en el Congreso de los Diputados.
Su candidatura se ha quedado muy lejos de los requisitos que el Reglamento del Congreso exige para formar grupo parlamentario propio, ya que tendría que haber llegado al 5% de votos y a cinco diputados y solo ha obtenido dos escaños, el de Garzón y el de su número dos por Madrid, Sol Sánchez.
Las posibilidades son escasas, porque depende tanto de negociar con otras fuerzas políticas para la cesión de diputados, como de una interpretación flexible del Reglamento por parte de la Mesa del Congreso. Está "todo abierto" y no se puede descartar "ninguna opción", decía Garzón, sin especificar más.
Izquierda Unida tiene a tres representantes de Galicia y Cataluña en las candidaturas de confluencia en las que también está Podemos y que pretenden formar grupo parlamentario propio: En Marea y En Comú Podem. Sin embargo, incluso sumándolos a un grupo de Unidad Popular, seguiría sin llegar al porcentaje de voto necesario, por lo que sería dependiendo de la interpretación de la Mesa. Lo mismo ocurriría si la opción fuera formar grupo con EH-Bildu.
Garzón se aferró al hecho de que históricamente ha habido interpretaciones "de todo tipo": unas veces se ha aplicado de forma flexible para que determinadas formaciones pudieran formar grupo sin cumplir los requisitos, y otras se ha interpretado de modo estricto para impedir formarlo cuando prácticamente se cumplían y apenas faltaban unas décimas para alcanzar el porcentaje de voto.
De hecho, recordó que en 2008 Iquierda Unida formó grupo "técnico" sin cumplir los requisitos del Reglamento. Lo hizo uniéndose a ERC, en situación similar, agrupando votos y escaños y repartiéndose los recursos, cupos y tiempos.
