La presidenta del Gobierno de Navarra y de UPN, Yolanda Barcina, ha destituido esta madrugada a su vicepresidente primero y secretario general del PSN, Roberto Jiménez, decisión con la que estalla definitivamente una crisis entre ambos partidos que desde hace dos semanas se intentaba superar. Tras esta decisión, los consejeros del PSN en Fomento, Anai Astiz, y Política Social, Elena Torres, han presentado su dimisión y el partido ha dado instrucción a sus cargos en el Gobierno para que hoy "recojan sus cosas".
El detonante, según fuentes de ambas partes, ha sido -para los regionalistas- las declaraciones que hizo ayer por la mañana Jiménez, y que por la noche reiteró la dirección del PSN, sobre un "agujero" en las cuentas del Ejecutivo superior a los 132 millones de euros reconocidos el pasado día 1, y -para los socialistas- que éste exigiera a Barcina por la tarde que informe "con claridad" a los navarros de las cifras reales del déficit.
BARCINA: SITUACIÓN INSOPORTABLE
La presidenta del Gobierno foral, Yolanda Barcina, ha reconocido que la "situación insoportable" entre los socios del Gobierno foral, UPN y PSN, había llevado en las últimas semanas a "crear problemas" por no "solucionar" los de los ciudadanos, lo que le ha obligado a destituir al vicepresidente socialista Roberto Jiménez.
"Sigo apostando por la fórmula de colaboración UPN-PSN, que ha dado resultados para tener los mejores niveles de Bienestar", ha señalado en todo caso, ya que ha reiterado su apuesta por esta fórmula de colaboración y ha evitado ponerse en cualquier escenario que suponga la disolución del Parlamento y la convocatoria de unas nuevas elecciones.
También ha señalado que hoy mismo ha podido hablar tanto con el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, como con el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, a quienes ha explicado su decisión.
En cuanto al cese de tres miembros de su Gobierno, ha comunicado que sus carteras serán asumidas por actuales consejeros de UPN, de forma que Álvaro Miranda sumará a su cartera de Economía y Hacienda la de Fomento, hasta ahora en manos de Anai Astiz; Juan Luis Sánchez de Muniain sumará a la portavocía del Gobierno y Cultura y Turismo, las responsabilidades de Presidencia y Administración local que llevaba Jiménez; y la consejera de Salud, Marta Vera, llevará ahora también la cartera de Fomento, que hoy ha dejado Elena Torres.
"DESLEAL" CON EL EJECUTIVO FORAL
La presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, ha justificado el cese del socialista Roberto Jiménez como vicepresidente y consejero de su gobierno por su "deslealtad" con el Ejecutivo y por "poner en jaque la credibilidad de Navarra".
"No se puede ser oposición y estar en el Gobierno poniendo en cuestión la propia credibilidad del Gobierno de Navarra, de la Hacienda foral y, yo diría más, como vicepresidente del Gobierno, poniendo en juego nuestra credibilidad como Comunidad", ha dicho en relación con la nota del PSN, en la que se responsabilizaba a Barcina de la situación de las finanzas públicas.
EL PSN PASA A LA OPOSICIÓN EN NAVARRA AL CREER QUE UPN HA ROTO EL PACTO
Mientras, el portavoz parlamentario del PSN-PSOE, Juan José Lizarbe, ha afirmado que su partido "pasa a la oposición" al entender que UPN ha roto "unilateralmente" el pacto que mantenían ambos partidos y el Gobierno de coalición formado hace un año "creando una grave crisis institucional".
A Roberto Jiménez, ha agregado el portavoz socialista a su llegada al Parlamento de Navarra, "le han echado del Gobierno por decir la verdad" en relación con las cuentas de la Comunidad foral, después de que ayer asegurara que el "agujero" era mayor de lo que había informado el consejero de Economía, Álvaro Miranda.
El vicepresidente primero del Gobierno de Navarra y secretario general del PSN, Roberto Jiménez, avisó ayer que este "agujero" iba a superar los 132 millones de euros barajados, situación de la que culpó al consejero de Economía y Hacienda, aunque mostró la "disposición" del PSN para tomar las medidas "que sean precisas" a fin de taparlo. Fue precisamente el anuncio del ajuste de 132 millones el que abrió una crisis de Gobierno, al estar los socialistas en desacuerdo con tener que volver a recortar gastos pocos días después de haber aprobado otro ajuste por casi 54 millones.