Cientos de vecinos de Esplugues de Llobregat y otros municipios barceloneses cercanos hacen cola desde las 12 horas, cuando se han abierto las puertas del salón de plenos donde se exponen las cenizas de la socialista Carme Chacón, para despedirse de su política más ilustre. Entre los presentes estaban familiares, amigos y antiguos vecinos y compañeros de trabajo de la exministra, que murió el pasa domingo en Madrid a los 46 años.