La líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, y el previsible candidato a la Comunidad de Madrid, Íñigo Errejón, han azuzado hoy a las bases de su partido a superar la frustración y desmoralización porque no pueden "permitirse el lujo de defraudar" en el próximo ciclo electoral.
Eso supondría "30 años más de impasse para el cambio", ha dicho Teresa Rodríguez, y su advertencia ha sobrevolado las jornadas "En Marcha 2019" que Podemos ha organizado en la Universidad Complutense de Madrid para prepararse de cara a las elecciones municipales, autonómicas y europeas del próximo año.
Rodríguez participaba en una conferencia sobre "cómo reforzar el cambio" junto al secretario de Análisis Estratégico de Podemos, Íñigo Errejón, quien ha resaltado la necesidad de superar la desmoralización y frustración que en muchos sectores de la sociedad ha supuesto que siga gobernando Mariano Rajoy, cuando la "gasolina" que impulsó al partido morado fue precisamente la esperanza de una victoria inmediata.
Según Errejón, las fuerzas de izquierdas han "perdido mucho tiempo en la pelea táctica" sobre quien es el culpable de mantener a Rajoy y eso ha pesado menos que la "suma" de los partidos progresistas, otro factor que ha provocado a su juicio esa desmoralización.
Si bien Errejón se ha alejado del discurso complaciente, también ha considerado que esa situación no es irreversible y se puede transformar, pero ha advertido de que no pueden confiarse porque tampoco es descartable que no venzan a la "desmoralización" o el cansancio.
Su receta es insistir en que "existe la posibilidad de transformación, que es posible, alcanzable, fácil y asequible", pero que esa esperanza que moviliza "a los de abajo" no debe sustentarse en que "los de arriba son muy malos o injustos", sino en que Podemos tiene "capacidades y condiciones para transformar la realidad".
El diputado de Podemos cree que lo que deben demostrar en 2019 es que pueden "revertir las medidas injustas e ineficaces" del PP en Ayuntamientos y Comunidades Autónomas, pero al tiempo reconoce que aún tienen pendiente ganar la "batalla de la confianza".
"Es una pregunta que nos tenemos que tatuar: ¿Cómo puede ser que haya gente que sienta más inquietud ante la posibilidad de que gobernemos que por que se mantengan aquellos que han instalado como norma general la precariedad, la escasez y el miedo?", se ha preguntado.
No han sido las únicas advertencias que se han escuchado en estas jornadas de trabajo.
Teresa Rodríguez también ha señalado los peligros de entrar en la dinámica de "construir aparato", lo que en otros partidos ha llevado a situaciones como la que hoy se vive en el PP con Mariano Rajoy y Cristina Cifuentes.
Su apuesta tampoco es "construir un partido que dure 140 años" como el PSOE, sino evitar "homologarse" y forjar una organización que "propicie el cambio".
Y ha recordado el coste que tuvo para IU entrar en el Gobierno de la socialista Susana Díaz para explicar que gobernar con el PSOE de Andalucía suponía para Podemos "homologarse" a un partido que ha gobernado la región durante 20 años.
De esa forma, la dirigente andaluza ha avisado del peligro de que les vean "como iguales" a las formaciones que han estado años gobernando, o de caer en la nostalgia y el ensimismamiento.
Para todo ello, considera muy importante construir alianzas y coincide con Errejón en que deben ser los distintos territorios los que decidan sus pactos, según sus distintas peculiaridades.
"No se trata sólo de qué cambio queremos, sino de con quién vamos a hacerlo", ha dicho recordando que en Grecia Syriza contaba con un "buen programa", pero no logró una "suficiente correlación de fuerzas para llevarlo adelante".
"No podemos permitirnos el lujo de defraudar", ha exclamado Teresa Rodríguez, al defender que Podemos debe "ser sincero con la gente" y "plantearle la verdad" ante la "resistencia de la oligarquía a abandonar el poder".