La Policía Nacional ha detenido a un matrimonio y a su hijo por presuntamente regentar un "supermercado" de armas en su casa y un trastero en Sant Vicen dels Horts (Barcelona) que vendía por encargo a grupos criminales y narcotraficantes que las usaban para ajustes de cuentas y amenazas a bandas rivales.
En rueda de prensa, el inspector jefe de la policía judicial en Mataró, Luis Javier Prieto, ha valorado que se trata de una de las aprehensiones de arsenales "más importantes" realizadas en Cataluña, con 64 armas de fuego incautadas --entre ellas kalashnikov y revólveres-- y 50.000 cartuchos.
La familia disponía de un arsenal de 64 armas, entre las que había pistolas, revólveres y carabinas.
Según informó la Policía, los arrestados adquirían las piezas en el mercado ilícito o en armerías, donde las compraban inutilizadas y posteriormente las habilitaban para su uso.
Las armas, la mayoría en perfecto estado de funcionamiento, se vendían a delincuentes y sus precios oscilaban entre los 3.000 y los 5.000 euros. A la familia se le han encontrado 39 pistolas, 12 revólveres, 13 carabinas -algunas consideradas armas de guerra- y más de 50.000 cartuchos.
También se han intervenido 98.000 euros, 626 dólares americanos, una máquina de recargar munición, placas policiales falsas y dos vehículos deportivos de gama alta.
Esta operación es la culminación de una investigación iniciada en el verano del pasado año y que saldó con la detención de 18 personas por tráfico de estupefacientes, robos con fuerza y estafas. En aquella ocasión se ocupó un arma de fuego a uno de los cabecillas, quien la había adquirido a los ahora detenidos. Esta arma, en un principio inutilizada, había sido manipulada y rehabilitada para disparar.
Los investigadores también han hallado a los arrestados una placa falsa de la Guardia Civil y otras dos de la policía de Nueva York y del Departamento de Justicia norteamericano. Las investigaciones han sido desarrolladas por agentes del Grupo de Policía Judicial de la Comisaría de Mataró.