La Guardia Civil y la Policía Nacional Francesa de Marsella, en una operación conjunta, han detenido en España a los jefes de las mafias marsellesa y corsa.Según informó el Instituto Armado, en el marco de esta operación han sido arrestadas un total de 30 personas y se han intervenido 92 kilogramos de diferentes sustancias estupefacientes, así como documentación y diferente material.
Dada la especial importancia de esta intervención, ésta ha sido supervsada por un equipo conjunto de investigación hispano-galo tutelado en España por el juzgado central de Instrucción número tres de la Audiencia Nacional y en Francia por el Tribunal de Gran Instancia de Marsella.
En este sentido, el líder de la mafia marsellesa detenido, que es un histórico dirigente de una organización criminal en Francia, dirigía sus actividades desde un bar de Castelló d'Empuries (Gerona). Los cárteles mafiosos corso y marsellés habían sumado esfuerzos para introducir masivamente cocaína desde Sudamérica a Europa usando como tapadera a empresas legales.
La Benemérita explicó que los dos clanes mafiosos desarticulados están entre las de mayor incidencia en Francia. La operación comenzó a mediados de 2009, después de que la Guardia Civil mantuviera contactos con las policías de otros países, en este caso con la BKA alemana. Las autoridades germanas destacaron entonces la existencia de una organización dedicada al tráfico de cocaína que implicaba a ciudadanos de varios países, entre ellos España.
ASESINATO EN MARSELLA
Los agentes españoles centraron sus investigaciones en R.M., de 61 años de edad y de origen marsellés, que podía estar dedicándose al tráfico de drogas, fundamentalmente cocaína. Este sospechoso mantenía contactos en España con un ciudadano alemán (E.S.) para llevar a cabo actividades relacionadas con el tráfico de cocaína.
En enero de 2010, la BKA o Policía judicial alemana desarrolló una operación en su país que conduce a la detención de E.S., junto a otras personas, y a quienes las autoridades alemanas imputan delitos de asociación ilícita y narcotráfico internacional.La investigación de la Guardia Civil continuó centrándose en R.M., conocido como "Chino", descubriendo que las actividades delictivas las podía estar dirigiendo desde un bar que regentaba en Castelló d'Ampuries (Girona).
El 14 de febrero de 2010 fue asesinado en Marsella E.I.H, persona de máxima confianza del ciudadano marsellés investigado por la Guardia Civil. A raíz de este hecho, los agentes españoles establecieron contacto con la Policía Nacional Francesa de Marsella, encargada de investigar el asesinato. Este cuerpo policial galo confirmó que R.M. era el jefe de uno de los cárteles más activos de la mafia marsellesa, al que en su país le constan múltiples antecedentes policiales y penales por los delitos de asesinato y otros.Durante los meses siguientes, ambos cuerpos policiales mantuvieron investigaciones conjuntas poniendo de manifiesto que R.M. es el responsable de coordinar las operaciones de una organización criminal dedicada al tráfico internacional de cocaína, desde Sudamérica a Europa.
PRIMERAS DETENCIONES
En abril de 2.011, y fruto del trabajo de ambos cuerpos policiales, se obtuvieron los primeros resultados con la detención en Marsella (Francia) de siete personas y la intervención de 60 kilogramos de hachís en el domicilio de uno de los detenidos.Pese a estas primeras detenciones, las investigaciones del equipo conjunto continuaron los siguientes meses, con continuos desplazamientos de agentes de los cuerpos policiales implicados al país vecino, obteniendo indicios y pruebas relacionadas con las actividades delictivas de la organización marsellesa.A finales de 2.011, los investigadores descubren que se ha producido una asociación entre R.M. y un individuo llamado L.F., identificado como el líder de un importante cartel de la mafia corsa con el objetivo de aunar esfuerzos y logística. Prendían ambas organizaciones trasladar partidas de cocaína de no menos de 420 kilogramos por año desde Sudamérica a Europa.
Para sufragar los gatos del envío de la cocaína, los responsables de ambos cárteles enviaban a Sudamérica a personas de su confianza para transportar pequeñas cantidades de droga. Una de estas personas fue detenida en el aeropuerto de la localidad bonaerense de Ezeiza (Argentina), con seis kilogramos de cocaína oculta en un doble fondo de su maleta.
SECUESTRO EN PERÚ
Recientemente, uno de los hombres de confianza de los dos líderes investigados, A.L.M. viajó a Perú para iniciar los trámites del envío de 26 kilogramos de cocaína a Europa. Fue tomado como rehén por el grupo delictivo que había proporcionado la cocaína en Perú.
En la fase final de la operación, han sido detenidos por la Policía Nacional del Perú en este país los secuestradores -cinco personas de nacionalidad colombiana- y liberado el rehén. Además, se intervinieron armas a los secuestradores y un kilo de cocaína.
Durante los últimos tres años se han llevado a cabo varios dispositivos policiales, que han culminado con la detención de un total de 30 personas, cuatro de ellas en España (detenciones practicadas en Gerona, Barcelona y Murcia), seis en Perú y el resto en Francia. Se han desarticulado, así los dos cárteles mafiosos investigados -marsellés y corso-, entre cuyos detenidos se encuentra sus dos jefes, así como la incautación de 26 kilogramos de cocaína y 60 de hachís en Francia; y 6 kilogramos de cocaína en Argentina.
