La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado hoy que "claro" que su partido tiene "pruebas" de que "algunos" miembros del PSOE de Castilla-La Mancha han espiado al PP, una actividad que, si bien no es ilegal, sí "inmoral e indigna" en política.
De Cospedal ha hecho estas afirmaciones tras visitar, junto al presidente de su partido, Mariano Rajoy, la empresa Miguel Bellido en Manzanares, al ser preguntada por la respuesta del PSOE a su acusación de que este partido pagaba detectives privados para espiar a miembros del PP.
"Si alguien quiere acudir a los tribunales, sería bueno porque así conoceríamos toda la verdad", ha manifestado.
De Cospedal ha insistido en que estas actuaciones "no son ilegales", pero sí "inmorales e indignas", y ha dicho que se enmarcan "dentro de una guerra sucia y una campaña muy sucia" que, "lamentablemente", se lleva a cabo "por algunos miembros del PSOE" en Castilla-La Mancha.
"Le vuelto a repetir que claro que tenemos pruebas", ha asegurado la secretaria general del PP, quien ha confiado en haber sido "lo suficientemente clara" con estas declaraciones.
En su intervención en Cuenta ante el Comité ejecutivo regional de Castilla-La Mancha, De Cospedal denunció así el espionaje del PSOE: "Ya hay muchos de nosotros, con algunos ejemplos muy significativos, a los que el PSOE les ha puesto detectives privados".
Se preguntó además de dónde procede el dinero con el que el PSOE supuestamente sufraga a los detectives privados que ha puesto a algunos miembros del PP.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha calificado de "frívola y disparatada" la acusación lanzada por la presidenta del PP en la región. Barreda, en declaraciones a los periodistas en Moral de Calatrava, ha lamentado que "alguien que debiera ser responsable se comporte de manera tan irresponsable" y ha recordado que Cospedal, en su condición de secretaria general del PP, "ha hecho acusaciones tan descabelladas como éstas en otras ocasiones".
Acusaciones que "no tienen ni pies ni cabeza", ha dicho el presidente regional, quien ha dicho estar acostumbrado a "disparates similares" y ha recordado que en verano de 2009 Cospedal cuestionó el Estado de Derecho al acusar "sin fundamento" a jueces, fiscales, a la policía, a los funcionarios y al Ministerio del Interior de espiar al PP.
"Yo no quiero enredarme en una polémica que es absurda", ha apuntado el presidente castellanomanchego, quien no obstante ha subrayado la "irresponsabilidad" de su adversaria en la próxima cita electoral.