La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha dicho hoy que la mayoría de los españoles respiró aliviada, al anunciar ayer el presidente del Gobierno el adelanto de las elecciones a noviembre.
Cospedal ha intervenido ante alcaldes y portavoces del PP de la provincia de Toledo en un acto celebrado en el pueblo de Nambroca, que ha tenido un marcado tinte electoral tras la convocatoria del 20 de noviembre que ayer anunció Rodríguez Zapatero.
La presidenta regional y secretaria general del PP ha señalado que la mayoría de los españoles se llevó una alegría y empezó a vislumbrar el cambio "que salvará al país de la crisis en que le ha sumergido el PSOE".
Cospedal ha convocado a los alcaldes y cargos públicos del PP a trabajar con ahínco para recuperar España, que es un "gran país", pese a la herencia "envenenada" que deja el Partido Socialista.
Si Mariano Rajoy gana las elecciones, ha dicho, recibirá una herencia de cinco millones de parados, cien mil millones de déficit y conflicto en la sociedad que ha atizado el PSOE para dividir a los españoles con normas y leyes que tenían ese objetivo.
Ha acusado a los socialistas de despilfarrar el dinero y de dejar la peor herencia posible pese a que recibió la mejor cuando accedió al gobierno.
Y ha insistido en que el candidato socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, es corresponsable de ese balance porque ha formado parte de ese gobierno, y cuando habla de una nueva etapa política que se abre, sólo puede referirse a la que protagonizará el PP con Rajoy a la cabeza, según ha indicado Cospedal.
Con Rajoy, ha asegurado que España tendrá un gobierno creíble, que trabajará sin descanso, solvente y en el que podrán confiar los inversores nacionales y extranjeros; será un gobierno para gobernar a los ciudadanos y no para utilizarlos para mantenerse en el poder como hacen los socialistas, ha afirmado.
En el caso de Castilla-La Mancha, Cospedal ha dicho ver con estupor los "ataques furibundos" de que está siendo objeto sólo por "decir la verdad" en cuanto a la situación económica que se han encontrado al acceder al gobierno, y ha dicho que es la primera vez que le ocurre algo así en toda su vida política.
En cualquier caso, ha lanzado un mensaje de esperanza y confianza y ha asegurado a los acreedores de la Junta que a partir de septiembre habrá un calendario de pagos para abonarles lo que se les debe.
María Dolores de Cospedal ha dicho a los alcaldes de su partido que, si todos trabajan juntos, van a conseguir sacar la región y el país adelante.