El secretario de Comunicación de Ciudadanos, Fernando de Páramo, ha afirmado que aquellos miembros críticos de su partido que ostentan un cargo en alguna institución y están cobrando por ello un sueldo público deberían renunciar si es que ya no sintonizan con el proyecto de la formación naranja.
"Lo que a veces no se entiende es que alguien no esté de acuerdo con unas ideas o unos planteamientos concretos pero sí esté de acuerdo en seguir manteniendo un sueldo y una serie de privilegios", ha declarado en una entrevista con Europa Press.
Así ha respondido cuando se le ha preguntado por los militantes que han anunciado su salida del partido tras la celebración de la Asamblea General del 4 y el 5 de febrero, en la que se decidió ubicar a Ciudadanos en el liberalismo progresista y eliminar del ideario la referencia a la socialismo democrático.
Desde entonces, varios militantes han dado a conocer su decisión de darse de baja del partido, entre ellos el portavoz en la Diputación de Valencia, José Enrique Aguar, que, sin embargo, mantiene su cargo público. Aguar explicó su salida por la "situación interna de falta de transparencia, democracia y participación" y porque considera que Cs se ha convertido en "una marca blanca del PP".
Otros cargos de la formación naranja, como la eurodiputada Carolina Punset, la diputada del Parlamento andaluz Mari Carmen Prieto o el portavoz en la Diputación de Málaga y concejal en el Ayuntamiento de la ciudad, Gonzalo Sichar, que también han criticado públicamente a la dirección de Cs antes y después del congreso de febrero, han optado por no dimitir y, además, seguir militando en el partido.
Tras expresar su "respeto" por aquellos que "deciden emprender otro camino" porque "dejan de estar de acuerdo con los principios que han suscrito y por los que han sido elegidos en una lista electoral y tienen una responsabilidad y un sueldo público", De Páramo ha añadido que cuando uno "no se siente identificado con el proyecto", "lo más honrado sería dejar el acta".