El expresidente del Gobierno y presidente de la Fundación FAES, José María Aznar, afirmó hoy en Perú que "lo primero que tiene que hacer Europa para salir de la crisis es frenar la destrucción de sus clases medias" y auguró que "España saldrá adelante como siempre lo ha hecho: con voluntad y valentía; haciendo reformas y tomando la iniciativa". Aznar hizo estas declaraciones en la presentación en Lima del informe FAES 'América Latina: una agenda de libertad 2012' durante la inauguración de la primera edición del Campus FAES Perú, en la que también participó la vicepresidenta peruana, Marisol Espinoza Cruz.
En su discurso, Aznar apuntó que "una de las principales diferencias entre la situación que atraviesan América Latina y Europa es precisamente la situación de sus clases medias". "Mientras en América Latina están en pleno proceso de expansión, en Europa se están contrayendo a niveles acelerados. Y esto es una tragedia", dijo.En este sentido, aseguró que "si lo primero que tiene que hacer América Latina para consolidar su prosperidad es afianzar sus clases medias, lo primero que tiene que hacer Europa para salir de la crisis es frenar la destrucción de las suyas".
En palabras de Aznar, "la clase media es la columna vertebral de una sociedad; lo que la sostiene y la cohesiona; lo que le da fortaleza y estabilidad. Por eso cuanto más amplia y pujante sea, más fuerte y más próspero será un país o una región". Aznar adujo que "la prosperidad no es fácil de conseguir y, cuando se consigue, no está garantizada". "Hay que mantener la estabilidad fiscal con una política de gasto público seria y responsable; ahondar en las reformas estructurales para hacer que la economía sea flexible y competitiva; avanzar en la liberalización y la apertura comercial para generar nuevos socios y nuevas oportunidades, e intentar forjar una clase media amplia, fuerte y sólida". A su juicio, "para que los beneficios de un ciclo económico positivo se conviertan en las bases de una prosperidad duradera hay que perseverar, con decisión, en el camino de la disciplina y las reformas". "Creer que basta con recibir una buena herencia económica para entregar un legado de prosperidad es un profundo error", dijo.
