La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, ha comentado hoy que el PP atraviesa una de sus crisis "más difíciles" y ha lamentado la "indefinición ideológica" del partido, así como la "falta de un relato que ilusione" a los votantes y que vaya más allá de la economía.
Así lo ha señalado en la rueda de prensa de presentación de su primer libro, 'Yo no me callo', en el que ha explicado que ha hecho "mucha autocrítica" para analizar los "fallos" que ha cometido el PP y que, en su opinión, le han llevado a sufrir un "descalabro electoral".
"No cabe duda de que el PP está en este momento en crisis, es una de las más difíciles que hemos tenido nunca", ha declarado.
A su juicio, las "medidas drásticas" que ha habido que tomar por la crisis económica y la reacción "autocomplaciente" ante los casos de corrupción son dos de las causas principales de esta crisis, pero no las únicas.
La irrupción de Podemos y Ciudadanos, la "desastrosa" política de comunicación del PP y el hecho de "no cuidar debidamente" a los votantes que optaron por su partido en las elecciones generales de 2011 a pesar de no ser simpatizantes, son a su juicio otros de los motivos.
Aguirre también lamenta la falta de un "relato" en el PP que "ilusione" y "emocione" a los votantes, que cree que debería basarse en la defensa de España y de la libertad.
Por otro lado, ha alertado de la "indefinición ideológica" que asegura que padece su formación, ya que considera que "hay mucha gente que no sabe que piensa el PP de las cosas".
Sobre el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, no ha querido pronunciarse sobre si debería dar un paso atrás si se repiten las elecciones generales. "Eso no tiene nada que ver con el libro", ha respondido.
El libro, que arranca con la derrota electoral del PP tras el 11-M, consta de 336 páginas y 19 capítulos, cuatro de ellos dedicados a la corrupción y los demás a analizar la trayectoria del partido desde 2004 hasta la actualidad.
Aguirre califica de "lamentable" y "vacilante" la respuesta de la dirección del partido al caso Bárcenas e insiste en que ella fue quien destapó la trama Gürtel.
Sobre Bankia, señala que el hecho de que Rodrigo Rato la presidiera cuando se conoció el agujero, sumado al escándalo de las 'tarjetas black', "aumentaron indudablemente" el rechazo popular al PP.
Tras recordar en la rueda de prensa que dimitió al frente del PP madrileño sin haber hecho "nada ilícito", simplemente porque el secretario general que propuso, Francisco Granados, "lleva más de un año en la cárcel" por la trama Púnica, Aguirre se ha negado a contestar a la pregunta sobre si Rajoy ha estado o no a la altura en los casos de corrupción.
Opina que el libro no tiene por qué "disgustar" a Rajoy, ya que no busca "preocupar a nadie" y "menos" a sus compañeros de partido.
"Es un libro abierto, una reflexión para ver qué nos ha pasado", ha sostenido.
En uno de sus capítulos, confiesa tener sentimientos "un poco maternales" hacia el exministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón, hacia el que asegura que siente un "gran afecto".
"Algunos creen que nos odiamos pero no es verdad, nos queremos, lo que ocurre es que estamos en las antípodas ideológicas", añade.
A la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, le reprocha que "no tenga reparo en criticar a los jueces (...) por entorpecer con sus sentencias las políticas que ella y los suyos quieren llevar a cabo" y también a "los medios de comunicación, a los que ha llegado a calificar de poderes ocultos y misteriosos".
En la rueda de prensa ha defendido la posibilidad de que el Felipe VI encargue en última instancia la formación de Gobierno a una persona de "consenso" que "sea capaz de atraer o concitar el mayor número de apoyos", como el expresidente socialista Felipe González, y ha comentado que repetir las elecciones generales sería "una pérdida de tiempo".
"¡Yo no me callo!", ha exclamado en un momento de su intervención Aguirre, que ha avanzado que tiene previsto entregar hoy mismo un ejemplar de su libro a Carmena, aunque encargará más.
