El Senado ha aprobado este miércoles, definitivamente y sin ninguna modificación en el texto remitido por el Congreso, la reforma de la ley de financiación de partidos políticos, que fija un recorte del 20 % en las subvenciones públicas y estrecha el cerco a los partidos para dificultar que se puedan financiar de manera irregular.
La reforma ha salido adelante con los votos a favor de 215 de los 218 senadores presentes en la votación y tras rechazar la mayoría popular una enmienda conjunta del PSOE, CiU, Entesa y PNV y otras dieciséis individuales de los distintos grupos, con lo que la nueva ley será publica en el Boletín Oficial del Estado después de nueve meses de tramitación parlamentaria.
La enmienda conjunta de los cuatro grupos pretendía introducir una cláusula de revisión para vincular la variación de las ayudas que reciben los partidos a la evolución la economía, en lugar de que la cantidad consignada cada año se deje al criterio del Gobierno de turno.