Los vecinos de Móstoles que viven en la zona residencial de Estoril II están aterrados por las continuas fugas de gas que están sufriendo en su urbanización. Todo comenzó por un cambio de compañía suministradora. Parecía que el cambio sería sencillo, ya que era pasar de gas propano, a gas natural. Sin embargo, desde entonces los vecinos han venido observando que se producen fugas de gas en las tuberías. El problema parece ser que la compañía ha cambiado los distribuidores, pero no las tuberías, lo que provoca que se produzcan pequeñas explosiones en los adaptadores y fugas de gas.
Los vecinos están preocupados y exigen una solución a un problema que llevan denunciando desde hace unos años. Temen que estos escapes de gas vayan a más y pueda producirse un accidente mayor.