La polémica está servida en Usera. Los vecinos no quieren un hostal de acogida junto a los parques en los que juegan sus hijos. Estará a la altura del 133 del Paseo de Santa María de la Cabeza y tendrá 14 habitaciones para 25 personas. Ayuntamiento y empresa piden tranquilidad, pero estos días el barrio se llena de quejas y pancartas.