La secretaria general del PSOE-M, Sara Hernández, ha pedido al Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados que medie ante el Gobierno central para poder solventar la "gravísima y traumática" situación financiera de Moraleja de Enmedio, un municipio de menos de 5.000 habitantes "arruinado" con 38 millones de euros de deuda y sólo 3 de presupuesto.
Sara Hernández y la alcaldesa de Moraleja de Enmedio, María Angeles Fernández, se han reunido este lunes con el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando, a quien han pedido ayuda ante la "irresponsabilidad de anteriores gobiernos del PP", que ha sumido al Ayuntamiento en 38 millones de euros de deuda cuando tiene 3 millones de euros de presupuesto".
También ha denunciado la "irresponsabilidad" de los gobiernos de Mariano Rajoy y de Cristina Cifuentes, que "han dejado a un lado su deber de vigilancia y de tutela y han permitido situaciones que ahora mismo están siendo investigadas en los tribunales". "Venimos a salvar a los vecinos de Moraleja de Enmedio y sólo sabemos hacerlo los socialistas porque el PP ha demostrado su nefasta gestión", ha apuntado.
"COMPLETAMENTE BLOQUEADOS"
Por su parte, Fernández ha remarcado que se trata de una deuda de 38 millones, de los cuales seis se deben a la agencia Tributaria y a la Seguridad Social.
"Ahora mismo estamos completamente bloqueados. No podemos recibir subvenciones", ha lamentado la regidora, quien ha afirmado que si no le desbloquean el municipio está "absolutamente arruinado y bloqueado". Viven de los impuestos de los vecinos, pero no dan para pagar la luz y el agua, entre otras cosas.
La primera edil ha relatado que han pedido ayuda a la Comunidad y al Ministerio y a fecha de hoy no han conseguido reunirse con Cifuentes, aunque sí con sus consejeros. Eso sí, no hay "una salida para Moraleja" a pesar de que llevan año y medio de trabajo pagando todos los impuestos y seguros sociales, algo que la anterior Corporación "no hacía desde 2006".
Ha defendido que han mantenido una actitud "bastante ejemplar", que han realizado un plan de ajuste y los vecinos "no tienen por qué pagar este desastre".
A este respecto, Sara Hernández ha advertido de que van a llegar "hasta las últimas consecuencias" y se ha preguntado por qué se concedían ayudas cuando desde 2006 el Ayuntamiento tenía deudas y no estaba al corriente de "sus obligaciones más básicas". Según ha indicado, al ser un municipio de menos de 5.000 habitantes es "responsabilidad directa del gobierno de Cifuentes y del Ministerio".
