Sus componentes realizaron el año pasado casi un centenar de rescates en los que se han enfrentado a todo tipo de situaciones: montañeros expertos que han sufrido graves accidentes, personas desorientadas o jóvenes sin el equipo adecuado que subestiman los riesgos de la montaña.
El Grupo Especial de Rescate en Altura de la Comunidad de Madrid fue creado en 1997 con la intención de dar respuesta rápida, eficaz y profesionalizada a los accidentes propios de las actividades de montaña. La selección de su personal se hace entre bomberos profesionales que lleven, al menos, tres años de actividad.
A los aspirantes a ingresar en el GERA se les pide un profundo y extenso conocimiento sobre todas las actividades propias de la montaña: esquí, escalada, alpinismo, orientación, travesía, supervivencia, etc.
Además, deben demostrar un conocimiento casi milimétrico de la sierra de Madrid, su orografía, caminos, parajes, meteorología y accesos. El personal seleccionado es, posteriormente, sometido a un curso de formación para el trabajo en el GERA.