El puente de la avenida Mediterráneo, en la circunvalación madrileña de la M-30, va a ser levantado esta noche cuatro metros por encima de su altura habitual para que la parte superior -por donde circulan los coches- quede separada de los apoyos con el objetivo de poderlos reparar.
Según han informado a Efe desde el Ayuntamiento de Madrid, las tareas de elevado del puente, que pesa 450 toneladas, se realizarán en la noche de este sábado por tratarse del momento de la semana en que menos tráfico hay.
Están previstos cortes en el tramo central de la M-30 en dirección sur, aunque el carril lateral estará abierto al tráfico.
Para poder realizar el alzado del puente, el Ayuntamiento de la capital ha traído una maquinaria desde Bélgica.
En la última semana varios operarios han trabajado en el montaje de las piezas necesarias para construir un pórtico diseñado de forma específica para sujetar este puente madrileño.
El izado será ejecutado por la empresa Sarens, que ha diseñado un pórtico metálico de 17 metros de longitud y 12 de anchura que se situará sobre el puente, y que alcanzará una altura de 10 metros. Al mismo tiempo, la empresa va a colocar dos vigas que serán los apoyos provisionales del puente.
Una vez realizada esta operación, el Consistorio podrá reparar la base del puente, que se encuentra muy deteriorada.
Cuando esté arreglado, se utilizarán los mismos equipos para hacer descender el puente, y se repetirá la operación en la otra parte (en ese caso, la ubicada en sentido norte de la M-30).
El sistema de elevación propuesto en estas operaciones es similar al que esta empresa está utilizando en el izado de elementos en el Nuevo Puente Champlain, sobre el río San Lorenzo, en Montreal (Canadá), y al del puente de Rande, en Vigo, según indican a Efe desde el Ayuntamiento de Madrid.
Este paso estará parcialmente cortado al tráfico hasta el próximo 1 de octubre debido a las obras de reparación.
El Ayuntamiento de Madrid recomienda evitar la zona en la medida de lo posible y el uso del transporte público.
Además, propone itinerarios alternativos: para entrar a Madrid, hacerlo por la M-30-O'Donnell o la A-4, y para salir, propone utilizar las salidas de O'Donnell o Ciudad de Barcelona.