El presunto pirómano acusado de provocar entre 2005 y 2006 quince incendios en El Berrueco ha llegado a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía por el que acepta una pena de cuatro años y tres meses de prisión frente a los 32 años y medio que pedía el Ministerio Público inicialmente.
El juicio, que se iba a iniciar hoy en la Audiencia Provincial de Madrid, ha quedado visto para sentencia ante este acuerdo al que llegaron el pasado viernes el fiscal y la defensa del hombre, acusado de delitos de incendio además de otro de robo con fuerza, otro de daños y uno de quebrantamiento de medida cautelar.
La Fiscalía solicitaba inicialmente una pena de 32 años y medio de prisión para el acusado, que reconoció los quince incendios que se le imputan entre 2005 y 2006 en El Berrueco, así como el robo en diversos pajares y daños en coches de esta localidad madrileña.
Según fuentes jurídicas consultadas por Efe, además del reconocimiento de los hechos por parte del acusado -que ha motivado el acuerdo entre las partes-, la rebaja de la pena se explica también por las "dilaciones indebidas" del proceso, iniciado en 2006 y sujeto a varias paralizaciones.
Además, el fiscal ha modificado la multa para el acusado, en situación de desempleo e "insolvente", a una cuota de tres euros diarios durante cuatro meses y quince días, si bien ha mantenido las indemnizaciones por los daños causados, que oscilan entre los 604 y los 141.266 euros.
De acuerdo al escrito de la Fiscalía, entre octubre de 2005 y agosto de 2006 el acusado prendió fuego a un restaurante, siete pajares, tres vehículos, una vivienda deshabitada y un garaje, y perpetró tres robos en otros pajares de El Berrueco.
Dos de estos incendios fueron provocados después de que el Juzgado de Instrucción número 1 de Torrelaguna le impusiera la prohibición de acercarse a menos de un kilómetro del municipio, donde, también después de dicha medida cautelar, dañó dos coches con pintura.
Aunque los incendios provocados por el acusado se produjeron en construcciones deshabitadas, dos de los incendios provocaron el desalojo de más de 25 vecinos por el humo y la propagación de las llamas a construcciones colindantes. Los daños causados se estiman, de acuerdo a la Fiscalía, en torno a los 400.000 euros en total.
CUANTIOSOS DAÑOS
José D.R. retomó su actividad delictiva, puesto que ya contaba con antecedentes penales, el 28 de octubre de 2005 provocando un incendio en un restaurante propiedad del Ayuntamiento de El Berrueco cuyos daños fueron tasados en 108.205 euros.
Ya durante los tres primeros meses de 2006 quemó indistintamente coches, pajares o viviendas deshabitadas. Entre los hechos que se le imputan en aquella época figura también el robo de un antiguo banco de madera de escaso valor que se hallaba en el interior de un pajar que no llegó a quemar.
Su actividad de pirómano le llevó el 23 de marzo de 2006 a prender fuego a un edificio destinado a pajar en el que la extensión de las llamas provocó que tuvieran que desalojar una vivienda adyacente en la que en aquel momento se encontraban en su interior dos personas de avanzada edad. Los daños causados en dicho incendio alcanzaron los 141.626,78 euros.
El 25 de marzo de 2006 el acusado fue sorprendido por agentes de la Guardia Civil tras haber provocado un incendio de otro pajar. Domínguez huyó y se refugió en su casa donde tras permanecer varias horas encerrado decidió entregarse voluntariamente.
El titular del Juzgado de Instrucción nº1 de Torrelaguna le puso en libertad pero como medida cautelar le prohibió acercarse a menos de un kilómetro de El Berrueco mientras se tramitaba el procedimiento. Sin embargo, Domínguez retomó su actividad delictiva cuatro meses más tarde provocando otros cinco incendios más.