El pederasta drogaba a sus víctimas a través de chucherías

  • Todos los casos han tenido lugar en los distritos de Ciudad Lineal, Moratalaz, San Blas, Hortaleza y Coslada

El presunto pederasta de Ciudad Lineal suministraba a sus víctimas un medicamento narcotizante derivado del orfidal, a veces a través de chucherías que ofrecía a las niñas, como ha detallado este jueves el Jefe Superior de la Policía, Alfonso Fernández Díaz.

"Las niñas eran drogadas a través de suministrarles un medicamento derivado del orfidal. En algún caso también les facilitaba chucherías", ha explicado el policía en una entrevista en Antena 3. Preguntado sobre si existen pruebas contra el ahora detenido, Fernández Díez ha aseverado que "existe algo" y que tienen "varios vestigios" de huellas.

EL MONSTRUO ACTUÓ EN CIUDAD LINEAL, MORATALAZ, SAN BLAS, HORTALEZA Y COSLADA

Ahora sabemos que el pederasta de Ciudad Lineal ya había actuado hace más de un año, en julio de 2013, en Coslada. La víctima: una niña de origen chino, de seis años de edad, a la que raptó y violó. El segundo caso, se produjo dos meses después, el 24 de septiembre de 2013. ese día se llevó a una niña dominicana de cinco años. La secuestró en Hermanos García Noblejas, la violó y la liberó horas después

No hay noticias de que volviera a actuar hasta siete meses más tarde. El pasado diez de abril, Antonio Ortiz intentó raptar a una niña japonesa a la salida del colegio, en la calle Torrelaguna. Pero la pequeña se resistió y consiguió huir.

Fue esa misma tarde cuando perpetró el secuestro que hizo saltar las alarmas. Una niña de nueve años, raptada en la calle Cidamón, cuando iba a comprar chucherías. Drogada y violada, apareció esa misma noche junto a una boca de Metro

La quinta víctima de Ortiz es esta niña china de seis años de edad. Secuestrada, el 17 de junio mientras jugaba junto a la tienda de sus padres, en la calle Luis Ruiz. Apareció cuatro horas después, la había dejado en tal estado que estuvo a punto de morir Otro caso, también desconocido hasta ahora y, afortunadamente, fallido. El de una niña de once años a la que intentó secuestrar en Moratalaz el pasado mes de agosto.

Días después, el 22 de agosto, sí lo consiguió en la calle Gomeznarro. Se llevó a una chiquilla de siete años aprovechando un despiste de su abuelo. La agredió en un descampado y la liberó hora y media después. El 25 de agosto quiso raptar a otra niña que jugaba en esta calle de Coslada. En esta ocasión tampoco lo consiguió.