Los jardines de la Finca de Vista Alegre se abrirán al público a mediados de 2019

  • Garrido: "De este modo conseguiremos satisfacer una justa y antigua reivindicación de los cerca de 250.000 vecinos de Carabanchel"
  • La Finca de Vista Alegre es uno de los nueve parques históricos de Madrid

Los jardines de la Finca de Vista Alegre, situada en el distrito de Carabanchel, se abrirán al público a mediados de 2019, previsiblemente en el mes de marzo, después de su acondicionamiento, en el que se está trabajando desde hace una semana a cargo de la Comunidad de Madrid. El presidente regional, Angel Garrido, ha visitado este lunes los trabajos y parte de las instalaciones sobre las que se va a intervenir a corto y medio plazo, que reúnen los jardines y edificaciones como la Galería, la Estufa, el Baño de la Reina y el Palacio Nuevo.

Garrido ha subrayado que la Comunidad de Madrid, propietaria del 80 por ciento de los terrenos --el otro 20 por ciento pertenece al Estado-- "ha asumido el compromiso de devolver a todos los madrileños y visitantes un patrimonio histórico, artístico y natural al que hasta ahora no han tenido acceso", lo que supone una inversión de 15,7 millones de euros.

En total, la duración de las obras e intervenciones se prolongarán hasta 2021, con el fin de desarrollar "un proyecto que va a hacer compatible el uso y disfrute de esta finca con el servicio público que prestan algunas de las instalaciones que ya recoge", como una residencia de ancianos.

"De este modo conseguiremos satisfacer una justa y antigua reivindicación de los cerca de 250.000 vecinos de Carabanchel", ha afirmado Garrido, quién ha hecho hincapié en que con esta actuación se incrementa las zonas verdes del distrito y se recupera "un atractivo turístico y cultural de la región".

La Finca de Vista Alegre es uno de los nueve parques históricos de Madrid, como el parque de El Capricho y las quintas de Los Molinos y Fuente del Berro.

OBRAS EN DOS FASES

El proyecto de remodelación se va a llevar a cabo en dos fases. Para la primera, que ya está en marcha y cuenta con una dotación de cinco millones de euros, se centrará en la limpieza y la eliminación de impactos negativos en el jardín, talas y podas; la recuperación de trazados históricos, caminos, amenidades e iluminación; y la recuperación de sus elementos singulares, como la Puerta Real, fuentes históricas y parcialmente la ría.

Además, en esta primera fase, se va a actuar también sobre algunas edificaciones del complejo, como la Galería, la Estufa y el Baño de la Reina, así como el vestíbulo del Palacio Nuevo que se incorporarán a la visita.

La segunda fase del programa de actuación, y para la que se asignará una partida de diez millones de euros, incluirá la restauración de edificaciones y la continuación de la remodelación integral de los jardines históricos, así como la planificación de la Finca a través de la redacción de un Plan Especial.

Al margen de este proyecto --aprobado en Consejo de Gobierno el pasado 17 de abril-- ya se habían realizado otra serie de actuaciones dentro del complejo, como la consolidación estructural del Palacio del Marqués de Salamanca e intervenciones sobre el arbolado, aunque "ha ido sufriendo un proceso lento de abandono", según ha reconocido Garrido.

QUINTA DE RECREO DE MARIA CRISTINA

En sus orígenes, la finca fue una quinta de recreo que contaba con varios palacios y edificios principalmente de estilo Neoclásico. A ellos se unía una gran ría navegable de aproximadamente 700 metros de longitud rodeada de extensos jardines y elementos ornamentales.

Además, la Reina María Cristina, cuarta esposa de Fernando VII, decoró las estancias del palacio principal con obras pictóricas de los artistas del momento que se sumaron a las que ya poseía de anteriores épocas.

Años después, la quinta fue donada a Isabel II y a su hermana la infanta Luisa Fernanda y, posteriormente, vendida a José de Salamanca y Mayol, marqués de Salamanca, que completó la construcción del Palacio Nuevo.

Pasó a manos públicas en 1886, pero, tal y como ha reconocido Garrido, "hasta ahora ha permanecido casi completamente ajeno a la vida de Madrid y de sus ciudadanos, una situación a la que este Gobierno quiere poner fin".

Garrido ha apostado por crear un espacio que, además de recordar su pasado a los madrileños, les permita "disfrutar de su belleza y de su tranquilidad", en uno de los distritos "más vivos y más dinámicos" de Madrid.

La superficie total de la finca alcanza las 45 hectáreas, algo menos de la mitad de la extensión del parque de El Retiro, y actualmente se está actuando sobre 11 hectáreas, que constituyen "un jardín de experimentación", en palabras de la Jefa del Area Técnica de Patrimonio Inmobiliario de la Consejería de Economía Empleo y Hacienda, Nuria Ruíz García.

Hasta ahora estaba dividida en 13 recintos que la fragmentan, impidiendo la comunicación entre ellos, pero ya se ha retirado alguno de los muros, con las garantías que requiere un entorno histórico, con el objetivo de recuperar "un jardín burgués que empezó siendo un jardín romántico, con espacios para la sorpresa, para el disfrute, para el ocio", ha explicado Ruíz García.

Por su parte, la portavoz de la Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de Carabanchel, ha manifestado que ha recibido este anuncio "con mucha alegría", y ha destacado la importancia de que los vecinos y visitantes puedan disfrutar y cuidar de este espacio verde.