Los vecinos de Hortaleza están desesperados. Temen que les agredan, que les atraquen, que quemen sus coches y dicen que las denuncias quedan en papel mojado al tratarse de menores que residen en los dos centros de acogida del barrio y no se puede actuar contra ellos. Esta semana se producía un nuevo suceso, cuando se prendió fuego al coche de un vecino.